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Febrero 28, 2009

Obama y la retirada de Irak

Obama ya ha anunciado los plazos concretos de la retirada de Irak y lo primero que llama la atención es la reacción paradójica que ha provocado en aliados y adversarios. Por un lado, John McCain se ha mostrado bastante receptivo al calificar el plan de "razonable". Por el contrario, los principales congresistas demócratas no están nada entusiasmados y han criticado algunos de los puntos concretos explicados por el presidente. ¿Se ha vendido Obama a los militares?

En primer lugar, las fechas. Las misiones de combate habrán terminado el 31 de agosto de 2010 y por lo tanto para entonces se habrán retirado todas las brigadas que tienen ese cometido. Después una "fuerza de transición" permanecerá en el país hasta diciembre del 2011, que es la fecha límite marcada por el acuerdo que firmaron los Gobiernos de Irak y EEUU en los últimos meses de la Administración Bush. Las dimensiones de esa fuerza son mayores de las esperadas, entre 35.000 y 50.000 hombres. Su labor será entrenar a las fuerzas iraquíes y enfrentarse siempre que sea necesario a los grupos relacionados con Al Qaeda.

Los plazos suponen un retraso de algunos meses con respecto a las fechas que Obama manejó en la campaña electoral. Ahí está claro que se ha mostrado como mínimo comprensivo con las necesidad del alto mando militar. El general Ray Odierno ya había dejado claro, sin pasar al nivel de insubordinación, que esos plazos no eran realistas, porque la situación sobre el terreno puede deteriorarse con gran facilidad. Las dimensiones de la "fuerza de transición" plantean algunas dudas. 50.000 soldados no forman una fuerza secundaria, y está por ver que se limiten a los fines señalados. Ya sabemos que el término 'Al Qaeda' es muy útil para justificar cualquier despliegue militar. Precisamente, esa cifra es una de las cosas que ha destacado en tono crítico la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi.

Obama se ha referido al acuerdo que firmaron los gobiernos de Maliki y Bush, no de pasada sino como un elemento fundamental en el proceso de retirada. Ése es un aspecto interesante. No digo que la prensa y los políticos norteamericanos hayan ignorado ese pacto, pero lo cierto es que no suele aparecer de forma muy destacada en los análisis sobre el tema. Muchos periodistas y políticos parecen dar a entender que todo depende aún de la voluntad del inquilino de la Casa Blanca, y eso no es así. Es cierto que la situación política en Irak puede cambiar, pero no hay que olvidar que el acuerdo, con su correspondiente fecha clara y rotunda para la retirada de las tropas, ha sido un valor esencial de la estrategia del primer ministro Maliki. Lo fue en las elecciones provinciales, en las que su partido y sus aliados obtuvieron muy buenos resultados, y lo será a buen seguro cuando se presente a la reelección.

Obama ha hecho hincapié en el discurso en que lo que aquí he denominado algunas veces "aventura imperial" de EEUU en Irak ha tocado a su fin. La responsabilidad sobre el futuro de Irak recae sobre los iraquíes, ha dicho. La primera línea de fuego debe ser asumida, al menos desde septiembre del 2010, por los iraquíes. No hay nada en su discurso sobre hipotéticas bases permanentes en el futuro. Es 'hasta la vista, baby' de la forma más elegantemente posible.

El problema es saber qué va a ocurrir en Irak hasta que ese repliegue se culmine. Ésa es una respuesta que pocos en Washington están dispuestos a responder después de tantos pronósticos errados. Y la gran duda no tiene nada que ver con Al Qaeda, sino con Kirkuk, con el Kurdistán iraquí y con las relaciones entre el Gobierno central iraquí y los kurdos. Nada se ha hecho al respecto, y los kurdos continúan convencidos de que Kirkuk será suya y que el régimen de autonomía del que ahora disfrutan se convertirá en un estatus cercano a la independencia.

El Gobierno de Maliki ha rechazado los intentos de otros partidos chiíes de encaminar el país hacia un sistema confederal. Quiere mantener la unidad de Irak también en el plano institucional. Si la confrontación política se convierte en violenta, ¿qué papel adoptarán las tropas norteamericanas? ¿Se irán del país mientras está comenzado a germinar una guerra civil? No hay mucha gente que esté dispuesta a responder a esas preguntas.

Posted by Iñigo at Febrero 28, 2009 01:29 AM

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