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Marzo 05, 2009

Purgas (II)

Ahora ya ha quedado claro: una purga con todas las de la ley. Carlos Lage y Felipe Pérez Roque han renunciado a todos sus cargos en el Gobierno y en el Partido Comunista de Cuba. Ambos han presentado la dimisión (o dicen haber presentado la dimisión) en sendas cartas enviadas por separado y prácticamente idénticas.

Segundo párrafo de la carta de Carlos Lage:

Reconozco los errores cometidos y asumo la responsabilidad. Considero que fue justo y profundo el análisis realizado en la pasada reunión del Buró Político.

Segundo párrafo de la carta de Pérez Roque:

Reconozco plenamente que cometí errores, que fueron analizados ampliamente en dicha reunión. Asumo toda mi total responsabilidad por ellos.

Después, Lage y Pérez Roque reiteran su adhesión a los principios de la revolución cubana y prometen continuar siendo fieles "al partido, a Fidel y a Usted" (Lage) y "a Fidel, a usted y a nuestro Partido" (Pérez Roque).

Los que han dictado las cartas no necesitaban ser originales.

Señalados como traidores por Fidel, no tenían muchas más opciones. ¿Por qué han sido destituidos de esta forma tan traumática? Lage fue desde principios de los noventa el arquitecto de las reformas económicas permitidas por Fidel Castro y el representante de Cuba en los foros internacionales a los que no asistía Fidel. Pérez Roque ha sido ministro de Exteriores durante una década. En los nueve años anteriores fue el secretario personal de Fidel al que acompañaba a cualquier acto público en el país o en el extranjero. Era su sombra, aunque ahora, ante la incredulidad general, Fidel se desmarque y diga que nunca le propuso para ningún puesto político.

Si bien ha sido habitual relacionar a Lage con las reformas económicas por su pragmatismo, siempre tuvo las mejores relaciones posibles con los hermanos Castro (de otra manera no habría ocupado esos puestos). No formaba parte de ningún sector moderado y su poder procedía directamente del que recibía de las altas esferas. Con ocasión del relevo de Fidel, se habló de él en los medios de comunicación extranjeros como una alternativa de futuro o incluso inmediata. Algunos dirigentes cubanos de nivel medio no lo descartaban. Ahora está claro que todos estaban equivocados. Pérez Roque siempre ha sido completamente ortodoxo y nunca se ha permitido la más ligera discrepancia política.

Ahora resulta que ambos son traidores por haber jugado en favor de los intereses del "enemigo" (se supone que EEUU). No van a acabar tan mal como Roberto Robaina, que pasó de ser ministro de Exteriores a pintar bancos en los parques, pero su descalabro es total. Uno es médico y el otro, ingeniero especializado en electrónica. Lo mismo terminan poniendo inyecciones y arreglando fusibles.

Pablo Milanés no debe de estar muy contento. Militar y mayor de 70 años parecen ser dos condiciones muy cotizadas en la élite cubana en estos momentos. No conozco ningún país en el que se valoren tanto esas características.

Posted by Iñigo at Marzo 5, 2009 05:02 PM

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Comments

Hombre: Lo de que han sido destituidos "de forma tan traumática",no lo entiendo tal cual. Esa expresión confiere algo de violencia ¿no crees?.
A no ser que ese palabro signifique algo más; lo cual nos obligaría a tener que explicarnos nosotros mismos al respecto.
Digo.

Posted by: mazuste at Marzo 5, 2009 07:49 PM

Traumático viene de trauma, y trauma, según la RAE, es "Emoción o impresión negativa, fuerte y duradera". Yo creo que se ajusta bastante bien al impacto de la noticia. Estoy seguro de que en Cuba saber que pesos pesados del Gobierno como Lage y Pérez Roque han colaborado con el "enemigo" ha causado esa impresión.

Posted by: Iñigo at Marzo 5, 2009 08:41 PM