Junio 14, 2011

El alemán tranquilo (y el emperador desnudo)

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Cuando Miami Heat consumó su victoria sobre los Celtics, LeBron James puso una rodilla en el suelo y bajó la cabeza. Parecía que la estrella quería detener el tiempo y tener una pausa para asimilar la alegría. En la pista y delante de todas las cámaras, desde luego.

Dirk Nowitzki hizo algo muy diferente al acabar el partido que daba a Dallas Mavericks el anillo de campeón. En vez de quedarse en la pista y dejar que todas las cámaras le enfocaran, se fue rápidamente al vestuario. Es de suponer que quería estar consigo mismo, echar unas lágrimas y prepararse para la entrega del premio. Desde luego, no iba a comenzar a pegar saltos.

Esta vez LeBron no claudicó ante los pesos pesados del Este como lo hizo cuando jugaba en Cleveland. No se escondió ante los Celtics. Sus penetraciones en los minutos finales fueron perfectas. Sus triples entraron. Parecía que había dejado atrás esa imagen de jugador que se achanta en el momento decisivo. Pero llegó la final ante Dallas y el equipo construido para ganar el anillo se hundió con él. En el momento decisivo, ese jugador extraordinario se escondió como un cobarde.

Quizá Dwight Wade, la auténtica superestrella de Miami, estaba disminuido por el golpe que recibió en un partido anterior. Tampoco es que Nowitzki estuviera libre de percances. En los dos primeros cuartos, tuvo un 1/12 que hubiera matado a cualquier otro jugador. Siguió intentándolo porque no podía borrarse, no podía desaparecer, a pesar de que otro jugador, Jason Terry, estaba ocupando su sitio en la anotación sin ningún problema.

No es lo mismo que se puede decir de LeBron James.

Los que piensan que el baloncesto, incluso en la NBA, es un deporte de equipo han tenido que recibir con inmensa alegría la victoria de Dallas. Los Mavericks son un equipo que siempre ha tenido buenas plantillas, al menos en los últimos años, pero que nunca suscitaba el interés de los especialistas. Siempre agradables de ver, con un baloncesto alegre y ofensivo, pero no muy imaginativo, no parecía que pudieran hacer frente a los equipos que, cuando llegan los play-off, bajan el culo al suelo y se ponen a defender como si fueran criminales de guerra.

Esta temporada, resultó distinto. Continuaron teniendo al alemán tranquilo como estandarte ofensivo pero a su alrededor tejieron un equipo que no vendía camisetas, pero que tenía el equilibrio perfecto entre ataque y defensa. Por Dios, hasta defendían muy bien en zona, que es una cosa... europea.

“It wasn’t about our high-flying star power,” Mavericks coach Rick Carlisle said. “Come on, how often do we have to hear about the LeBron James Reality Show? When are people going to talk about the purity of the game and what these guys accomplished?”

Los Mavericks no estaban en el negocio del reality show. No tenían pinta de aparecer en los anuncios de Nike. ¿Jason Kidd? Todo el respeto del mundo, pero 17 temporadas sin un anillo. ¿Nowitzki? Tremendo anotador, pero nada que hacer ante la aristocracia de la Liga. ¿Terry? Gran tirador, pero nadie va a tener miedo a un jugador que sale del banquillo. ¿Pivots? No se puede decir que Chandler haya tenido una trayectoria deslumbrante en su carrera.

Pero este año han formado un gran equipo.

¿Cómo se sabe eso? No por los 'highlights', los resúmenes de las jugadas más espectaculares. Ni por el número de jugadores que algún día llegarán al Hall of Fame. Ni por los mates inauditos o jugadas imposibles.

Una buena forma de apreciarlo es ver lo que hacen en el momento de la verdad. Hay una estadística que no está nada mal. Entre el segundo y el quinto partido, los Mavericks anotaron 60 puntos por 26 de los Heat en los últimos seis minutos de todos esos partidos. ¿Hace falta decir algo más?

Ese topicazo de 'fuerza de la naturaleza' es perfecto para definir a James. Es un jugador excepcional. Junto con Wade, no puede fallar siempre. Los Heat ganarán un anillo, y probablemente más de uno. No esta vez. El espectáculo lamentable que dio LeBron al abandonar Cleveland y la presentación de la nueva plantilla de Miami garantizaron que el equipo se convirtiera en el más odiado de América. El desenlace ha sido una forma de justicia poética que muchos habrán agradecido.

Si era necesario algún detalle más para confirmarlo, James y Wade lo sirvieron cuando montaron un numerito para burlarse de las toses de Nowitzki, del que se dijo que tenía 39 grados de fiebre en la mañana de uno de los días de partido. Luego, le echaron la culpa a la prensa por el escándalo que se montó, faltaría más. Por último, James escribió él sólo un capítulo en el manual del mal perdedor con sus declaraciones posteriores a la derrota ante Dallas: "All the people that was rooting on me to fail, at the end of the day they have to wake up tomorrow and have the same life that they had before they woke up today".

Traducción: sois unos mierdas, tenéis unos empleos de mierda y yo soy multimillonario.

"This is the King", dice a veces LeBron cuando llama a alguien por teléfono. Y como decía alguien, la NBA ha descubierto que el emperador está desnudo. Mientras no respete a los rivales, no tendrá ninguna opción. Nunca creerá que necesita mejorar su juego para ganar.

Su triste realidad es que no es (o aún no es) el nuevo Michael Jordan. Ni siquiera es el nuevo Scottie Pippen.

Debería comenzar a trabajar como lo ha hecho el alemán tranquilo durante 13 temporadas.

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Junio 02, 2011

Shaq

Para los que nunca vieron jugar a Wilt Chamberlain o Bill Russell, Shaquille O'Neal fue el mayor gigante que nunca pisó una cancha de baloncesto. Casi un personaje de dibujos animados.

23,7 puntos y 10,9 rebotes a lo largo de su carrera. 27 puntos y 11,8 rebotes en los años que jugó con los Lakers. 35,9 puntos y 15,2 rebotes en las tres finales que ganó con los Lakers. Cuatro anillos de campeón.

En realidad, debería haberse retirado hace tiempo, pero qué demonios, él salía a la pista a divertirse.
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Shaquille en 1989 y por qué ha sido mejor jugador que Kobe.

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Mayo 10, 2011

El futuro de Pau Gasol

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No desees nada malo a un compañero de equipo, pero la agresión de Bynum a Barea en el último partido de los Lakers en los play-off ha podido salvar el cuello a Pau Gasol. Ya es la segunda vez que lo hace esta temporada y, por si fueran necesarias referencias, Magic Johnson ha dicho en mas de una ocasión que los Lakers deberían traspasarlo. La humillación sufrida ante Dallas obliga a cambios radicales en la gestión de la plantilla y eso en la NBA obliga a desprenderse de piezas valiosas para conseguir lo que necesitas.

En la NBA, no es suficiente con pedir un crédito a Caja Madrid para iniciar la reconstrucción del equipo. Lo importante a veces no es el dinero que tiene el dueño del equipo en su cuenta corriente sino los salarios de los jugadores que debes ofrecer en el mercado. Para la próxima temporada, los Lakers no tienen entrenador, no tienen banquillo, tienen a una estrella (Kobe Bryant) que nadie cree que acepte en el futuro un rol secundario cuando sea evidente la inevitable decadencia, y tienen que decidir de cuál de los dos pivots titulares prescinden para poner los cimientos de cara al futuro.

Claro que puede ocurrir que los llamamientos de los medios de comunicación para tomar decisiones dramáticas no sean escuchados y el club decida estirar la cuerda un año más. A ver lo que pasa. Pensar que lo que ha ocurrido es un accidente y que con algunos cambios menores en unos meses estarán en condiciones de volver a aspirar al título. Sobre todo, si no hay soluciones milagrosas.

Perhaps more than anything, the notion that Pau Gasol can be this team's next great leader was swept away. His sudden and odd postseason disappearance was the most obvious reason for the Lakers' troubles, his fall completed Sunday when he scored 10 points while being pushed around by everyone but his coach, who thankfully refrained from hitting him for a second consecutive game.

La prensa de Los Angeles ha sido dura con Pau Gasol. Son los mismos que antes rastreaban el diccionario para encontrar el elogio adecuado, porque las palabras habituales no eran suficientes. No hay ojeriza ni conspiración. La actuación de Gasol en los play-off ha sido tan triste que no cabe aceptar otra cosa que esta lluvia de críticas. No ayuda que el español diga que tiene que aprender a dejar fuera de la cancha los problemas personales. ¿A qué se refiere?

No está obligado a contarlo pero los aficionados a los Lakers tienen derecho a decir que ellos también tienen problemas y eso no les libra de presentarse en el trabajo todos los días. Y Gasol no se ha presentado en estos play-off. Ha estado físicamente, se le ha visto, pero su cabeza estaba en otro sitio.

Sorprendido como todo el mundo por esta demolición imprevista, Henry Abbott escribe un artículo muy interesante sobre los clichés que se manejan habitualmente ante las grandes citas deportivas. La concentración. La dureza mental. La capacidad para aislarse por completo de los gritos, la pasión y la presión. Los periodistas no tienen ni idea sobre lo que ocurre dentro de un vestuario o, aun más, dentro de la cabeza de cada jugador. Y concluye que al final todo se reduce a baloncesto, a las jugadas bien ejecutadas, al jugador con talento que hace lo que los demás no pueden evitar.

En el caso de la eliminatoria ante Dallas, a un jugador, Nowitzki, capaz por sí solo de desmontar la (hay que decirlo, muy endeble) estructura del otro equipo.

Para los muy preocupados por la suerte de Gasol que temen que acabe implicado en un juego de fichas que termine con él en un equipo del montón, nada peor que este artículo de un blog escrito por alguien que sabe mucho de baloncesto y que opina que la decisión más razonable para los Lakers debería ser traspasar al jugador español. Si no mata antes a alguien en una cancha, los 23 años de Bynum son una garantía de futuro más atractiva que Gasol.

Por otro lado, los 57 millones que Gasol debe cobrar en las próximas tres temporadas son un obstáculo evidente para cualquier equipo al que haya que convencer para que entre en un traspaso. En la NBA sí que saben firmar contratos blindados.

Posted by Iñigo at 12:13 AM | Comments (1) | TrackBack

Mayo 07, 2011

El inesperado hundimiento de Gasol

Se acabó el rollo zen. El entrenador de los Lakers perdió su célebre compostura y tranquilidad tibetana para lanzar dos acometidas contra Pau Gasol durante la derrota en el partido ante Dallas. Con un 3-0 en la eliminatoria, los Lakers están casi eliminados. Ningún equipo ha superado esa desventaja en una serie a siete partidos.

Resulta algo doloroso admitirlo, pero las críticas a Gasol en la prensa son completamente justificadas. Otra cosa es que él no sea el único responsable de la derrota. Anoche, excepto Bynum y Odom, todos los demás jugadores compitieron a un nivel muy inferior al que requería la ocasión.

Esta vez, no toca tanto machacar con el juego "blando" del español, desmentido en las dos últimas finales de la NBA. No hay ninguna faceta del juego en la que Gasol haya estado bien en los play-off. En el momento de la verdad, ha anotado cinco puntos menos que en la temporada regular y su porcentaje de acierto en el tiro es diez puntos menos. Es un ejemplo de jugador que ha perdido la confianza en sí mismo, no intenta las jugadas que eran habituales en él y las pocas veces en que lo hace raramente consigue algo positivo.

Si la eliminación se consuma, no hay que destacar cambios profundos en la plantilla de los Lakers. En los equipos en los que los puntales son bastante veteranos, hay una idea obvia que se suele cumplir: no van a ser mejores en la próxima temporada. Es una plantilla cara (a la que se le adjudica un presupuesto total en salarios de 91 millones de dólares), muy por encima del límite salarial.

Se paga un dólar de penalización por cada dólar que te pasas de ese límite, aunque existen una serie de excepciones a la hora de computar esa cantidad, y no sé cuántas de ellas afectan a la masa salarial del equipo.

Dado su rendimiento, contratos como los de Blake (4 millones) y Walton (5,2 millones, un momento ¿cómo puede cobrar tanto Luke Walton?) parecen un derroche que el club no se puede permitir. Pero si los Lakers acometen una reconstrucción potente están obligados a poner sobre la mesa piezas de alto valor.

Tanto Kobe como Bynum son intocables. Por tanto si tienen que ofrecer jugadores de gran nivel a cambio en un traspaso, sólo les quedan Gasol y Odom. Gasol tiene contrato hasta 2014 con entre 18 y 19 millones de dólares de sueldo en cada temporada. La idea de prescindir del español era, antes de los play-off, una alternativa estúpida. No me extrañaría que en los próximos días aparezcan artículos en la prensa de Los Angeles planteando esa misma posibilidad.
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Domingo:
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ESPN dio ayer esta comparación anoche durante el partido entre Memphis y Oklahoma. Marc Gasol (16 puntos, 7 rebotes) ofreció toda la intensidad de la que ahora carece Pau. En la NBA, el Gasol de moda es el hermano pequeño. Bill Walton lo compara con un personaje de una novela de Jack London. Ganó Memphis, por cierto, que se pone 2-1 en la eliminatoria.

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Noviembre 21, 2010

Matador

Lo de Blake Griffin no es un mate. Es un homicidio en primer grado. Acabó con 44 puntos y 15 rebotes. Los 'highlights' fueron para su equipo, pero la victoria se la llevó el rival, los Knicks. Si te ganan los Knicks, está claro que tu futuro en la Liga es bastante oscuro. Al menos, los Clippers pueden ir a ver a Griffin sabiendo que el dinero de la entrada está bien invertido.

Posted by Iñigo at 05:10 PM | Comments (1) | TrackBack

Noviembre 03, 2010

Kevin Garnett, el matón

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¿Trash Talk en la NBA? De toda la vida. La intimidación es un elemento más del juego y algunos de sus protagonistas son un auténticos profesionales de la especialidad. Lo han hecho todos. ¿Los mejores también? Al menos, desde los 80 todos. Larry Bird, Michael Jordan, Gary Payton... Eran buenos con las manos, pero con la lengua no conocían rival. Ejemplos hay de sobra. Aquí hay algunos legendarios, sobre todo el de Bird.

Sin embargo, lo que ha hecho ahora Kevin Garnett es ir demasiado lejos. No le vale con ser un matón reputado, además de excelente jugador. Sus rivales han tragado hasta que a uno le parece que lo que ha hecho es repugnante. Charlie Villanueva dice que le llamó "enfermo de cáncer". Víctima fácil. Villanueva sufre de un tipo de alopecia.

Esto es algo más que provocar al adversario. Es dejar claro que eres un tipo miserable.

Garnett ha hecho un comunicado para matizar el insulto. Afirma que en realidad le dijo que era "un cáncer para su equipo y para la Liga". No parece que mejore mucho. También comenta que nunca se burlaría de una persona que padeciera esa enfermedad.

El jugador de los Celtics tiene un problema de credibilidad. Pocos definen tan bien la figura del matón como él, porque es raro que se ponga tan burro con jugadores de su calidad. Es famoso por ensañarse verbalmente con los rivales débiles, en especial si son extranjeros. En una ocasión, terminó por hartar a Calderón. Gasol sufrió con frecuencia el abuso. Curiosamente, el acoso se redujo o no fue tan evidente cuando, ya en los Lakers, el español demostró que competía al máximo nivel para ganar la Liga.

El último extranjero que ha descubierto cómo se las gasta Garnett es el ruso Mozgov, de los Knicks. El tipo se lo toma casi a broma y no se explica cómo una estrella con ese historial se rebaja a ese nivel.

¿Debería intervenir la NBA?
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23.50
Más ejemplos del estilo de Garnett con una referencia a lo que decía antes.

The complaint has always been that Garnett is something of a paper tiger — that he’d never pick on Tim Duncan or Shaquille O’Neal this way, and that if a player who could match him physically actually stood up to him on the court, KG would walk away.

Posted by Iñigo at 09:28 PM | Comments (2) | TrackBack

Octubre 30, 2010

Alguien tiene que hacer de Scottie Pippen

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Bill Simmons se marca un artículo de cerca de 4.000 palabras para responder a la pregunta de si LeBron James y Dwyane Wade pueden coexistir en el mismo equipo y convertirlo en una máquina imparable. Todo comienza con una historia sobre Disney y el momento en que a principios de los 80 la compañía se vio ante una decisión que iba a definir su futuro, a quién elegir para el puesto de consejero delegado.

La respuesta fue ofrecer una especie de copresidencia a dos directivos, Michael Eisner y Frank Wells, la típica opción de los que no saben decidirse. Era algo que en principio no iba a funcionar, pero que fue adelante gracias a que Wells aceptó en la práctica convertirse en el número dos. No exactamente ser el vicepresidente. Tendría el control de los asuntos financieros y Eisner sería el macho alfa, el líder de la manada. Ambos formaron el dúo perfecto que permitió a Disney continuar siendo un imperio del entretenimiento.

En otras palabras, Wells aceptó que Eisner fuera Michael Jordan y se quedó con el papel de Scottie Pippen.

Tras ver los dos primeros partidos, Bill Simmons no apreció que un reparto de papeles de este tipo pueda funcionar en Miami Heat. James y Wade son demasiado grandes, en ego y calidad, como para aceptar un rol secundario. Ni por el juego que practican, ni por el tiempo que cada uno necesita tener el balón en sus manos, ni por el lenguaje corporal que se pudo apreciar en la cancha en esos encuentros (derrota en Boston y victoria en Filadelfia).

Eso fue antes del tercer partido. Anoche los Heat derrotaron a Orlando Magic y lo hicieron por la vía tremenda (96-70). El equipo más odiado actualmente de la NBA demostró que eran sus rivales de Florida los que habían estado hablando de más a lo largo del verano. Orlando resistió en los dos primeros cuartos (51-45) sólo porque confirmó algo previsible. Dwight Howard arrolló a sus marcadores (19 puntos en la primera mitad) porque Miami no tiene a nadie que pueda pararlo ni siquiera con ayudas.

Pero tras el descanso Orlando encajó un parcial de 14-0 y desapareció del partido. Un punto a favor del entrenador de Miami: ha impuesto un juego basado en la defensa, lo que da a entender un cierto nivel de sacrificio por parte de sus estrellas.

En las dos victorias, quien interpretó el papel de Michael Eisner fue Wade (anoche 26 puntos, 20 tiros a canasta). Fue LeBron James el que se contentó con el rol de número dos (15 puntos, 7 asistencia, 13 tiros). Casi no penetró en la zona contraria buscando un mate o bandeja y la mayoría de sus puntos vinieron en tiros de media distancia.

Pero no tiene que ser siempre así. Aún es pronto para sacar conclusiones.
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Rajon Rondo, 24 asistencias en el partido ante los Knicks.

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Octubre 27, 2010

LeBron James no ha aprendido la lección

¿Qué debería hacer?, se pregunta LeBron James en este anuncio de Nike con cameo de Don Johnson distribuido hace unos pocos días, muy poco antes del inicio de la temporada de la NBA. Hay muchas opciones, pero ninguna de ellas pasaba por un estreno tan calamitoso como el de anoche. Miami Heat perdió en Boston por muchas razones, pero la principal es que aún no es un equipo. Es un pequeño consueño saber que los equipos hechos a golpe de talonario no obtienen el éxito de forma automática. No pasan de cero a cien en menos de ocho segundos.

Los Celtics, con mejor plantilla que la temporada pasada, fueron un hueso muy duro con su habitual defensa de hierro. No es que en ataque fueran extraordinarios, porque nadie lo es en un estreno, pero no dejaron dudas de que ganarles en su casa no está a la altura de los equipos que aún no saben a lo que juegan. Que es el caso de Miami.

Sólo cuando se pusieron en modo Cleveland en el tercer cuarto consiguieron reducir diferencias. Traducción: balones a LeBron (31 puntos, 10/21) y los demás a mirar. Es cierto que las dos otras estrellas, Dwyane Wade (4/16) y Chris Bosh (3/11), tuvieron un día horrendo. Puntualización: todos hablan del Big 3 de Miami, del equipo montado sobre tres estrellas. James y Wade lo son. Bosh, no. Es un muy buen jugador que se beneficiará de estar en cancha con dos colegas de ese calibre, pero no está al mismo nivel. Dejémoslo en Big 2,5.

Había que ver al entrenador de los Heat, Erik Spoelstra, en la banda con cara de '¿qué se supone que debo hacer ahora?'. Los apuestas de los que creen que Pat Riley es un mal bicho han subido mucho. Son los que predicen que Spoelstra acabará teniendo el mismo final que Stan Van Gundy. A mitad de temporada, Riley le quitará el puesto y se autonombrará entrenador.

El petardazo de anoche no es una condena a muerte. Los Heat se recuperarán y acabarán la temporada regular probablemente con 60 victorias o más. Es en cualquier caso una buena respuesta a los pronósticos habituales en el mundo del deporte. Los lees y piensas que jugar los partidos es una pérdida de tiempo.

Por su parte, LeBron (o sus asesores o Nike, o todos juntos) ya ha empezado mal. Después del deplorable espectáculo con el que comunicó su salida de Cleveland y de su horrible actuación en la eliminatoria ante Boston de la temporada pasada, le convenía no exactamente una cura de humildad, pero sí intentar diluirse dentro de un gran equipo. Ser, eso sí, el capitán que les llevará a la victoria. Dejar el marketing, el culto al ego y la venta de zapatillas para un poco más adelante.

Pero no, tenía que hacer el anuncio. Por mucho que tenga un punto cómico y que acabe con una bandeja, y no con un mate (signo de humildad), es como decir que todo continúa girando en torno a él.
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--NBA Season Predictions: More Wide Open Than We Think? The Painted Area.

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Septiembre 08, 2010

Era la Serbia de antes

Nos queda el consuelo de haber visto uno de los mejores partidos del Mundial de baloncesto. Sí, es un consuelo estúpido porque perder siempre hace daño y aún más ser eliminado en cuartos de final. El cambio de defensor en el último ataque de Serbia nos perjudicó porque Llull podría haber estado más cerca de Teodosic, pero da igual. Un triple de ocho o nueve metros no se puede defender.

Esta no es la selección serbia del Europeo de 2009, sino un equipo mucho mejor al que un año más de experiencia le ha dado más en varios apartados del juego y no le ha quitado nada de su talento natural.

Ejemplo: en el último cuarto, Bjelica se descuida en defensa y deja que Rudy reciba y anote, y además le hace falta. Creo recordar que casi no quedaba nada en esa posesión. Gran error que dejaría tocado a cualquiera. Pues bien, en el siguiente ataque Bjelica se levanta de tres y anota un triple.

Siempre pareció que el ataque de los serbios era más fluido que el español, condicionado por el mal porcentaje de triples (38%) y la dificultad en obtener superioridad en la pintura, donde en teoría éramos superiores. Sin embargo, ante un rival que anota 15 de 30 tiros de tres, todo se convierte en una empresa muy difícil. Incluso así, llegaron empatados a 89 a los últimos 24 segundos.

El marcador ha hecho pensar a algunos que la defensa fue mala: el típico error de pensar que la defensa siempre es buena en un partido a 70 puntos, y mala si el que gana llega a 90. No siempre ocurre así.

Fue como jugar contra la Serbia o Yugoslavia de los viejos tiempos. Como en esa final que el Partizan le ganó al Joventut con el triple de Djordjevic. La gente suele olvidar que la canasta anterior de Tomás Jofresa fue no menos inverosímil (una penetración de uno contra tres).

Es más fácil acordarse de la puñalada cuando la recibes que cuando la propinas. Todos nos acordamos del Mundial ganado en Japón. Son menos los que no olvidan que si Nocioni hubiera anotado el triple en el último segundo de la semifinal, España no habría llegado a la final.

Cuestión de perspectivas.

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Luis Scola

Qué maravilla, Luis Scola. Cómo será que los últimos minutos del Argentina-Brasil no representan lo que hizo Scola, a pesar de que anotó todas las canastas decisivas de su equipo en el último cuarto.

Fue un espectáculo grandioso de baloncesto ofensivo. Se defendió poco, cierto, pero qué importa. Siempre hay tiempo de ver a dos equipos con el cuchillo entre los dientes y defendiendo con el hacha en la mano para acabar el partido jugándoselo todo a los tiros libres. Como decía Nocioni en su twitter: Gracias, Animales.
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Los errores del seleccionador brasileño, que en realidad es argentino.

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Agosto 28, 2010

Vaya comienzo

No dice mucho de un campeón del mundo de baloncesto que entre en estado de pánico ante una selección como la francesa en el debut del Mundial de Turquía. La derrota ante Francia duele (72-66) por la forma en que se ha producido. Cuando un equipo anota 15 de 30 tiros libres, eso quiere decir (además de que no pueden quejarse de los árbitros) que toda la preparación, la experiencia y la calidad no han servido para afrontar en buenas condiciones mentales el primer partido. Fallar tantos tiros libres no es una cuestión de talento, sino de cabeza.

Y es la cabeza la parte del cuerpo de Rudy Fernández que presenta un aspecto más deteriorado. En varios momentos del encuentro, ha apostado por el circo en vez de por las soluciones más lógicas y sencillas. A 1.43 para el final, con seis puntos de ventaja para los franceses, Rudy ha cometido una falta, la cuarta, y no se le ha ocurrido otra cosa que protestar. Conclusión: eliminado, cuatro tiros libres seguidos y 63-54 en el marcador.

La prensa española se ha hartado de crucificar a su entrenador en Portland, Nate McMillan, por un supuesto maltrato del jugador, a pesar de que los números dicen lo contrario. Rudy jugó 23 minutos por partido en la temporada regular (8,1 puntos y 2,6 rebotes por partido con un porcentaje de tiro del 37%). En los play-off, con la lesión de Brandon Roy, tuvo la opción de ser titular y fracasó. La prensa no hizo sangre aquí con este pequeño detalle para no desmentir la idea de que Rudy jugaría muchos más minutos con otro entrenador. Ignoro en qué se basan para tenerlo tan claro.

No es extraño que la prensa de Portland no sea tan 'considerada' con Rudy.

Pero la derrota ante Francia no ha sido culpa de un único jugador. Sólo la segunda parte de Navarro luce un poco ante tanto error. El banquillo francés ha estado excelso y ha llegado a conseguir más puntos que los titulares. Los reservas españoles no han mejorado mucho al cinco titular. En la primera parte, se ha defendido bien, aunque anotar 10 puntos en el segundo cuarto ha hecho que ese esfuerzo haya resultado baldío.

Y si una selección caótica y desmelenada como la francesa te hace 29 puntos en el último cuarto, entonces tienes que llegar a la conclusión de que el equipo se ha venido abajo de forma estrepitosa en el momento decisivo.

Los argentinos llegan a este Mundial con varias bajas relevantes y por tanto con pocas opciones de que el banquillo mantenga el nivel de los titulares. Han ganado a Alemania 78-74 con 27 puntos de Delfino y 20 de Scola. Algunos no fallan.

La nota positiva está en el pasado reciente. También se empezó muy mal en el Eurobasket y al final ganaron, y de qué manera. Hasta puede ser un regalo si eso nos evita a EEUU en semifinales.

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Agosto 20, 2010

Boxeo (con silla) en un partido de baloncesto

Hubo un tiempo en que las sillas volaban desde la grada a la pista en algunos partidos de baloncesto en Grecia. La costumbre ha regresado, pero con una interesante novedad. Esta vez, ha sido un jugador el que ha echado mano de la herramienta. El amistoso entre Grecia y Serbia se ha visto interrumpido por una gresca monumental entre jugadores de ambos equipos. Fotsis y Teodosic se las han tenido en la pista hasta que el base serbio ha golpeado, no muy fuerte, en la barbilla a Fotsis. El griego ha respondido con un escupitajo, y a partir de ahí los demás jugadores se han ido uniendo a la fiesta en oleadas.

Nenad Krstic y Sofoklis Schortsanitis se han repartido unos cuantos puñetazos y han terminado monopolizando la atención de todos. A Schortsanitis le llaman Baby Shaq porque suele rondar los 150 kilos cuando se descuida con el peso. Hay que decir que Krstic pega como una nena. Cuando al final parecía que nadie iba a parar al pivot griego, Krstic le ha lanzado una silla y le ha abierto una brecha en la cabeza a otro jugador griego, Bouroussis, que creo que hoy no jugaba porque estaba lesionado. Ahora lo está con más razón.

Con buen criterio, el partido ha quedado suspendido. Era eso o acabar en el hospital.

Y todo esto en un amistoso.

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Julio 09, 2010

La huida de LeBron James

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Hay algo que hace aún más grandes a las estrellas de la NBA (y no me refiero a los jugadores muy buenos sino a las leyendas). Todo el mundo los asocia con un equipo. Pero también los hay que cambiaron de ciudad por las circunstancias que fueran. Por cada John Stockton, fiel a Salt Lake City hasta el final, hay un Karl Malone que al final de su carrera intenta trazarse un plan B para conseguir un anillo de campeón que se le ha negado. No es un drama que en los últimos años un jugador sea un poco egoísta.

La huida de LeBron James de Cleveland entra en otra categoría. Las primeras reacciones a su decisión de irse a Miami (junto a Dwight Wade y Chris Bosh) han sido homéricas. Sobre todo, por la forma. En España tuvimos un caso similar con el fichaje de Figo por el Real Madrid, pero la cosa es aún más dramática. Lo que ha hecho LeBron es dejar tirada a toda una ciudad y a su Estado (nació en Ohio), que ahora se ha quedado en estado zombi. No lo llaman "traición" por nada.

James era agente libre y podía fichar por el equipo que quisiera. Hasta ahí todo bien. Tenía una cierta obligación moral por el equipo con el que había llegado a la Liga, pero estos conceptos tan difusos se pierden en el aire cuando entra en escena el dinero. Todo el mundo tiene derecho a recibir más dinero por su trabajo y alcanzar el éxito profesional. Por mucho que duela a los hinchas (incluidas las personas que proyectan en los clubes deportivos sus pasiones y sus frustraciones, en especial las segundas), los deportistas profesionales también piensan en lo mismo que ellos.

El espectáculo ha sido deplorable y vergonzoso. LeBron y su nutrido equipo de asesores montaron un circo a mayor gloria del autoproclamado "King James", un jugador extraordinario pero que todavía no ha ganado un anillo. En primer lugar, visitas a la residencia del monarca para que las delegaciones de equipos interesados acudieran a besar su mano y exponer su plan de negocio. Los medios de comunicación hacían el papel de coro de cada movimiento. Se filtraron decisiones inminentes, cada equipo se aplicó en sus artes propagandísticas y los analistas especularon con todas las variables.

Tuvo que ser duro para Cleveland, pero lo peor venía al final. El rey montó un programa televisivo para anunciar la decisión, con la publicidad contratada por su gente y se supone que destinada en el futuro a causas benéficas. Como en un buen reality, la noticia se hizo esperar durante bastantes minutos para prolongar el suspense. La gente de Cleveland ya no tenía uñas que comerse.

La bola blanca salió con el nombre de Miami Heat.

El dueño de los Cavaliers se ha comportado como si fuera una esposa de cierta edad a la que el marido ha abandonado por Miss Florida, de 20 años. En realidad, ha reaccionado peor (y en Comic Sans forchristsake), y de hecho es el único damnificado de la historia por el que nadie derrama una lágrima. El mismo tipo que permitió todos los caprichos de LeBron no puede quejarse ahora de que el niño malcriado le deje tirado en mitad de la calle.

Todo es dinero y no lo es al mismo tiempo. LeBron habría ganado más dinero quedándose en Cleveland, aunque hay que recordar que Florida es un chollo en términos fiscales. Pero lo que busca él es el título de campeón de la NBA, leyenda del baloncesto y heredero natural de Michael Jordan (todo en ese orden) que a su vez multiplicaría por mil sus ganancias. Si no ganas un título (mejor dicho, unos cuantos), no sólo no eres Jordan, sino que te quedas en un Allen Iverson. No hay color.

Curioso lo de Miami. En estos momentos, aparte de sus tres nuevos fichajes (Wade cumplía contrato y renueva), sólo tiene a un hombre más en plantilla, porque han traspasado a Michael Beasley, su segundo mejor jugador hasta ahora con la intención de hacer hueco salarial a los nuevos.

Los tres contratos de James, Wade y Bosh les saldrán por unos 45 millones en el primer año. El límite salarial para cada club en la NBA será en esta temporada de 58 millones. Lo pueden sobrepasar pero por cada dólar que se pasen, pagan otro dólar de multa a a la NBA. Es lo que hacen todos los años en Nueva York, lo que demuestra que la empresa propietaria de los Knicks tiene tanto dinero como poco cerebro.

No queda mucho dinero para las demás piezas. La directiva cuenta con que jugadores veteranos acepten jugar por el mínimo salarial (que depende de su edad y de sus años de experiencias en la Liga) a cambio de tener un papel secundario en el equipo del que todo el mundo hablará y al que muchos dan ya como favorito. Es la jugada que tan bien le salió a Boston (con Pierce, Allen y Garnett), y no tan bien a los Lakers (por el año en que se juntaron Bryant, O'Neal y Malone). Pasar de la nada a todo. De comparsas a favoritos. Lo más parecido al método Florentino que hay en la NBA.

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El aspecto negativo es que el número de James puede haber convertido a Miami Heat en el equipo más odiado de la NBA. Los Lakers ya saben que eso es algo con lo que se puede vivir si al final ganas el título. Lo peor es ser como los Knicks.

El año en que más jugadores de calidad salían al mercado como agentes libres ha terminado con un rosario de fichajes en el que algunas piezas han recibido salarios desorbitados. Algunos clubes se han vuelto locos y pronto vendrán los momentos de penitencia cuando jugadores que cobran cinco millones de dólares anuales ofrecen un rendimiento paupérrimo.

Mal asunto, porque los clubes --muchos de ellos pierden dinero a espuertas-- y la NBA tienen la intención de aplicar las rebajas en la inminente negociación del convenio colectivo de la Liga. Lo mismo todo este entramado de egos, dólares y patrocinios se viene abajo, y los clubes terminan imponiendo un cierre patronal como el de hace unos años.
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Bill Plaschke, Los Angeles Times:

LeBron James is the King, all right. The King of Crass. The King of Callous. The King of Cowardice. What kind of man arranges and stars in a nationally televised infomercial during which he kicks his hometown to the curb? What kind of man summons a crowd of millions to watch him break up with a city that has loved and supported him for 25 years?

Greg Cote, Miami Herald:

We are the kingdom now. Miami is the capital of basketball. South Florida is the epicenter of American sports. It became so by royal decree at 9:27 p.m. Eastern time, July 8, 2010.
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--Portadas de prensa en Cleveland y Nueva York.
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Un detalle de la portada del Akron Beacon Journal, el periódico de la localidad natal de James.
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Para chulos, los de Nueva York

Por cosas como éstas es por lo que caen tan mal los neoyorquinos en EEUU.

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Junio 16, 2010

El Baskonia, campeón (o por qué a veces ganan los herbívoros)

En deporte, los milagros ocurren en raras ocasiones, o prácticamente nunca (es decir, igual que en la vida real). Por utilizar un ejemplo de fútbol, cuando un delantero dispara al poste, no es mala suerte. Es sólo que ha disparado al poste. Cuestión de precisión. Es lo mismo que los penaltis (¿un artículo de baloncesto con dos ejemplos de fútbol?, ¿pero qué broma es ésta?). Siempre dicen que es una lotería, es decir, cosas de la suerte. ¿Qué tendrá que ver la suerte con lanzar mal un penalti o tener un portero muy bueno con nervios de acero?

Es frecuente que los partidos y las Ligas se ganen por una serie de pequeños detalles. Siempre gana el mejor. No en términos absolutos. Gana el que ha estado mejor en el momento en el que todo se dilucida.

El Baskonia ha ganado la Liga al Barcelona en plan maracanazo. Nadie creía (excepto, detalle importante, los jugadores del Caja Laboral y su entrenador) que alguien pudiera arrebatar el título a los azulgranas. De hecho, casi nadie creía que pudiera ganar un solo partido. Los comentaristas deportivos suelen apostar por lo obvio, aunque casi diría que en este caso era disculpable. El pronóstico era unidimensional en España y también en las webs de baloncesto del resto de Europa.

El Barça había ganado sus partidos de la Liga Europea con una media de 15 puntos de diferencia, decían en artículos por lo demás bien escritos. Era un dato relevante que demostraba la superioridad de la mejor plantilla de Europa. El Baskonia ha ganado la Liga por 3-0. Tres victorias con diferencias de cinco puntos, un punto y un punto. En semifinales, ganó al Real Madrid por 3-2. El margen de las victorias fue de dos, cinco y ocho puntos. Lo dicho, cuestión de precisión. De explotar tus recursos y de impedir que el contrario haga lo mismo con los suyos.

Es cierto. La clave fue la defensa, pero sobre todo el carácter. Si juegas contra los mejores, más tarde o más temprano te van a hacer un ocho. Hay equipos que se niegan a rendirse. Cuando algo empieza a pintar mal o cuando está ya (casi) todo perdido, aun así continúan en pie. Ali ya sabía que Foreman le iba a moler a palos en el comienzo del combate de Zaire. Aguantó sin irse a la lona hasta que llegó su oportunidad.

Lo que nos lleva a los herbívoros. Al vídeo que ha sacado hoy Fogonazos.

¿Qué puede hacer un honrado herbívoro contra un depredador dotado por la evolución para campar a sus anchas en la posición superior de la cadena alimenticia? ¿Confiar en la suerte? (le tocará a otro) ¿Resignarse a su destino? (no puedo hacer nada por evitarlo). No exactamente.

Luego están los detalles. Decían en Ball in Europe, donde hacían unas interesantes comparaciones entre la final de la ACB y la de la NBA, que la primera clave era la actuación de Navarro. El escolta anotó 18 puntos en 40 minutos, pero con un 5-15 en tiro, digamos que como en un día malo de Kobe Bryant. A punto estuvo de protagonizar la jugada decisiva con un triple más tiro libre adicional espeluznante en la prórroga.

Aunque para jugadas la arremetida final de San Emeterio. No fue una carga suicida porque de esa manera es difícil hacer el quiebro con el que se deshace de Sada. Menos lúcido que en partidos anteriores, San Emeterio hizo la jugada de la Liga. Habrá quien diga que Morris se equivocó al hacerle falta, pero no es el caso. Un pivot no puede permitir que el rival le niegue la victoria en una penetración.

El MVP de la final ha sido Splitter, como también lo fue de la temporada regular (algo que antes sólo había hecho Sabonis). 14 puntos (6/11). 13 rebotes. 4 asistencias. 4 balones recuperados. 36 de valoración. 43 minutos en cancha pegándose con la impresionante batería interior del Barça.

Bueno, si después de esto, se va a jugar a San Antonio, al menos se puede decir que ha dejado una huella para toda la vida. Porque no creo que se pueda ver otra vez una victoria como ésta. Lo que nos lleva al general Patton Ivanovic. Como es de los que no se rinden, no tolerará esta frase. Volverá a intentarlo.

No rendirse. Ésa es la idea.

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Junio 10, 2010

La final de la ACB

22.45
Y no se rindieron. Ni en el comienzo del partido (0-10) ni cuando el Barça reaccionó. La primera derrota azulgrana en casa en 16 meses pone la serie final en un inesperado 0-1. Al final, 58-63 para el Caja Laboral. En el último cuarto, el equipo vitoriano aplicó la misma medicina que el Barça ha endosado tantas veces en esta temporada a sus contrincantes.

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En 30 minutos comienza el primer partido de la final de la ACB. Uf, la que nos va a caer. Desgraciadamente, tengo que coincidir con el análisis que hacen en The Painted Area:

We're picking Barcelona in 3. It's not like Caja is a mediocre team, they're actually quite impressive. It's just Barcelona is nearly flawless, one of the best units Europe has ever seen.

Claro que si el Baskonia pudo eliminar al Real Madrid sin poder recurrir a uno de sus principales argumentos (el tiro de tres), quién sabe. Pero enfrentarse al Barça es como hacerlo contra una selección europea. Al menos, tenemos a Splitter, el mejor pivot que juega en Europa. En Ball in Europe, han recuperado una actuación de la pasada temporada.

El Baskonia es un equipo que no se rinde con facilidad. Va a tener muchas oportunidades de poner a prueba esa virtud.

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Junio 01, 2010

Finales de la NBA

Un top ten de las mejores jugadas en las finales de conferencia de la NBA.

Y aquí cómo fueron los dos partidos de Lakers y Celtics en temporada regular. Ambos ganaron en el campo del rival por un solo punto.

--¿Aguantarán los castigados huesos y articulaciones de los jugadores de Boston?

--¿Seguirá aportando tan poco el banquillo de los Lakers?

--¿Resultará imposible parar a Kobe tal y como pudieron comprobar en Phoenix y Utah?

--Si como es probable vemos a un Paul Pierce tan increíble como en la eliminatoria ante Orlando, ¿podrá defenderle en condiciones Ron Artest?

--¿Se atreverá Boston a dejar a Artest que tire los triples que quiera?

--¿Dejará Rajon Rondo en evidencia a Fischer o será éste quien anote el triple decisivo?

--¿Darán tantos palos los hombres altos de Boston que Gasol tendrá que comprarse un esqueleto nuevo?

Posted by Iñigo at 12:58 AM | Comments (1) | TrackBack

Mayo 15, 2010

LeBron, sólo LeBron (II)

Un análisis del horrible juego de LeBron en el penúltimo partido de la serie.

Se apunta algo fundamental, que Jn comenta en el artículo anterior. La defensa de los Celtics a lo largo de toda la eliminatoria fue excelente. El entrenador de Orlando, Stan Van Gundy, lo confirma y hace una buena crítica del tipo de análisis que aparece en los medios de comunicación. Casi siempre se hace excesivo hincapié en los aspectos negativos: por qué un equipo ha perdido. Y lo que ocurre es a veces más sencillo: el otro equipo jugó mucho mejor.

Posted by Iñigo at 02:04 PM | Comments (1) | TrackBack

LeBron, sólo LeBron

Lebron derrota.jpg

Si una catástrofe natural como las que suelen aparecer en las películas arrasara la mitad de Nueva York, incluso así los supervivientes estarían felices. Porque tienen más cerca El Día de LeBron. El día en que un joven de 25 años, el mejor jugador de la temporada regular de la NBA, ponga su firma en un contrato en el que la parte contratante de la primera parte sea el equipo de los New York Knicks. Los Knicks, ya saben. Uno de los equipos más patéticos de la NBA y también una de las grandes marcas de la Liga.

¿Cómo definir a los Knicks? Por ponerlo más fácil, es como si el Real Madrid de Florentino estuviera peleando con el Valladolid y el Jerez en los últimos puestos de la tabla. Un año tras otro. Es cierto que en los últimos dos años, ha reducido su presupuesto, pero no hace mucho, el equipo tenía una de las tres plantillas más caras de la Liga, siempre por encima del límite salarial, y al final terminaba estando entre los peores equipos.

Los neoyorquinos están contentos porque la patética eliminación de los Cleveland Cavaliers en las semifinales de la Conferencia Este casi ha finiquitado la existencia de LeBron James en el Estado de Ohio (al menos, eso se comenta). Ahora es agente libre y puede fichar por el equipo que quiera. Los Knicks han jugado toda la temporada pensando en esa posibilidad. Tienen dinero de sobra para hacer la máxima oferta posible. ¿Se imaginan los aficionados de un equipo del deporte que sea en noviembre, cuando empiezan los partidos, y saber que el equipo no aspira a nada más que llegar al final con una nómina aligerada para poder hacer La Gran Oferta? Pierden de 10. No importa. Pierden de 20. No importa. Ganan de 10. Importa aún menos. Sólo están marcando cruces en el calendario.

Y no pueden decir que el deporte profesional en EEUU es así. Al menos, no en todos los sitios. En las canchas de Utah Jazz y Portland Trail Blazers, la mejor compra que pueden hacer los periodistas de fuera (eso ha dicho alguno) es un par de tapones en los oídos. Los periodistas locales ya saben que perderán audición mucho antes que el resto de los mortales y lo llevan con resignación. Es como Grecia, pero sin lanzamiento de objetos al campo (pobres griegos, eso lo hacían en los noventa, ahora se portan mucho mejor).

Pero en otros sitios, y Nueva York no es el único, si no eres el mejor, no importa demasiado. Lo único relevante es conseguir a La Estrella. El superhombre que solucionará todos los problemas.

Todo eso a pesa de unos cuantos comentarios muy certeros que apuntan al escandaloso fracaso de James en la eliminatoria ante los Celtics de Boston. En el último partido, no ganó el mejor, sino el menos palo. Los viejos, desgastados y doloridos Celtics dieron una muestra de orgullo. En especial, Kevin Garnett.

Ya casi no puede ni saltar. Las rodillas no se lo permiten. Sin embargo, buscó su juego sin sorpresas (no va a ofrecerlas con 34 años y en la NBA desde 1995) y se aprovechó de la escandalosa negligencia del entrenador rival.

Los números de LeBron fueron algo más que engañosos. 27 puntos, 19 rebotes y 10 asistencias. Los que faltan: un 38% de porcentaje de tiro y nueve pérdidas de balón.

Pobre gente de Cleveland. No contentos con la humillación, se marcan una canción. Cantan 'We are LeBron' con la música de 'We are the world'. Qué pena dan.

La Liga continúa. Menos mal que hay un paréntesis de varios días. De lo contrario, muchos pensarían que ya ha terminado.

Posted by Iñigo at 03:25 AM | Comments (1) | TrackBack

Mayo 05, 2010

Los Suns en español

los suns.jpg

Phoenix Suns jugará esta madrugada en su partido de play-off contra los Spurs de San Antonio con el nombre del equipo en español en la camiseta: Los Suns (la foto es de un partido anterior). El equipo ha tomado la medida en protesta por la ley antiimigración. Lógico, la NBA está llena de inmigrantes (no sé si se les podría considerar trabajadores cualificados). Charles Barkley y Steve Nash han apoyado la medida.

Ya hay un ejemplo de que la ley debería costar muy caro a la economía de Arizona. El Ayuntamiento de Boston se ha apuntado al boicot. Phoenix es una ciudad en la que se celebran muchas convenciones. ¿Quién quiere visitar un sitio en el que te pueden parar por la calle si tienes la piel algo oscura por si acaso?
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0.30
Steve Kerr: no es un detalle para quedar bien. Es una declaración política. Los Spurs están encantados con la idea y es posible que se apunten en otro partido de la serie.

Posted by Iñigo at 10:09 PM | Comments (5) | TrackBack

Enero 31, 2010

Obama en la NCAA

Lo último de Obama es que también se apunta a comentar partidos de baloncesto. Al menos, no desentonó cuando bajó a la posición de los comentaristas durante el partido de la liga universitaria entre Georgetown y Duke, dos de los grandes equipos de la NCAA. Por cierto, ganó Georgetown por 89-77.

En la próxima, le veremos bajar en algún tiempo muerto para dar instrucciones a los jugadores.

Posted by Iñigo at 02:22 PM | TrackBack

Enero 29, 2010

Pau con las estrellas

Pau Gasol estará en el All Star Game de la NBA. Ha entrado dentro del cupo de jugadores elegidos por los entrenadores. Para la Conferencia Oeste han elegido, junto al español, a Chris Paul, Kevin Durant, Dirk Nowitzki, Zach Randolph, Brandon Roy y Deron Williams.

Por el Este, han incluido a Derrick Rose, Gerald Wallace, Paul Pierce, Al Horford, Chris Bosh, Rajon Rondo y Joe Johnson.

A los que hay que añadir los quintetos titulares elegidos por los aficionados, entre los que sorprendentemente aún está Allen Iverson. Hay gente que vota sin ver los partidos. Pau Gasol recibió 1.051.784 votos, su hermano Marc 353.155, y Luis Scola 580.243.

¿Qué haría Ricky Rubio en un All Star, aunque fuera el de los novatos, si ya en los partidos de competición hace esto?

Posted by Iñigo at 01:02 AM | Comments (4) | TrackBack

Enero 16, 2010

Arenas acabará en prisión

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Gilbert Arenas se ha declarado culpable de la acusación de tenencia de armas sin licencia. Esto ya no tiene que ver con estar suspendido en la NBA, sino que es una cosa mucho más seria. El delito puede suponer una pena de hasta cinco años de prisión. El jugador de Washington Wizards ha llegado a un acuerdo con la Fiscalía por el que renuncia al juicio. El fiscal no pedirá una pena superior a los seis meses, pero ese acuerdo no compromete al juez, que podría imponer una sentencia mayor.

La pena no se conocerá hasta el 26 de marzo.

El jugador vive en el cercano Estado de Virginia, donde se supone que sí tenía licencia para sus cuatro armas. A saber:

Authorities then seized the four guns from Arenas's house in Virginia, including the 500 Magnum; a 50-caliber gold-plated semi-automatic Desert Eagle with magazine; a .45 caliber, black semi-automatic Kimber Eclipse with a magazine; and a .9mm Browning with a magazine.

Pero no para la ciudad de Washington. Arenas cometió la estupidez de llevar consigo las cuatro, violando además la prohibición de la NBA de llevar armas en todos los pabellones. Quien se va de rositas es su compañero, Javaris Crittenton, que, según Arenas, también exhibió un arma, y la suya cargada. Pero la pistola no se ha encontrado en ningún sitio y por tanto no se pueden presentar cargos contra el jugador. De momento.

Las armas de Arenas no llevaban munición. Eso es un detalle irrelevante en términos legales. Pero hay que preguntarse en qué estaba pensado cuando llevó la artillería al vestuario y la utilizó para una broma estúpida.

Ahora los Wizards, en el caso de que haya condena a prisión, sí que tienen en principio motivos legales para cancelar el contrato de Arenas. Hablamos de mucho dinero. En julio de 2008 firmó un contrato de seis años por valor de 111 millones de dólares (80 aún por cobrar). No está claro que el club pueda hacerlo. Es posible que acaben en los tribunales, aunque hay indicios de que las relaciones entre el jugador y los Wizards son irrecuperables.

Lo que es seguro es que Arenas saldrá de prisión y podría tener la opción de volver a jugar la próxima temporada. El ex entrenador Avery Johnson ya ha dicho en televisión que le vendría muy bien a los New York Knicks. Qué raro. Los Knicks necesitarían una prisión entera para mejorar su juego. Los abogados de Arenas pueden empezar a echar un vistazo a las leyes sobre armas en el Estado de Nueva York.

[La foto es de un anuncio de una campaña de Peta.]

Posted by Iñigo at 02:23 AM | Comments (4) | TrackBack

Enero 07, 2010

Gilbert Arenas, el idiota del mes

Arenas armas.jpg

Ser un millonario no te hace más inteligente. Ser un deportista millonario, tampoco. La NBA ha producido una buena cantidad de jugadores con una extraordinaria inteligencia para el juego y un cerebro limitadísimo para todo lo que hay que hacer fuera de la cancha.

Gilbert Arenas los supera a casi todos. El alero de los Washington Wizards protagonizó un incidente en el vestuario de su equipo cuando sacó un arma en una disputa con un compañero de equipo, aparentemente por una deuda de juego. El hecho de que la pistola no llevara balas en el cargador no convertía el caso en irrelevante. La NBA prohíbe que los jugadores lleven armas en los pabellones. Por lo visto, también es ilegal en la ciudad de Washington.

El hecho de que jugadores de la NBA tengan licencias de armas y no salgan de casa sin ellas no es especialmente sorprendente. De hecho, es bastante habitual. Siempre, claro está, que respeten las leyes del Estado en el que se encuentran. Como viajan por todo el país, y las leyes son diferentes en cada Estado, les conviene estar informados.

La primera excusa que dio Arenas sonaba bastante poco convincente. Dijo que no quería dejar las armas en casa para que no estuvieran al alcance de sus hijos. Como si no pudiera haberlas guardado en un armario cerrado con llave o en una caja fuerte. Porque no llevaba encima un arma en el momento del incidente. Ni dos ni tres. Cuatro.

Al igual que muchos jóvenes negros de su edad, Arenas parece pensar que llevar armas es una cuestión de estatus. Las tiene porque es un tipo duro. O aparenta serlo.

Se estaba jugando una sanción y podía haber reducido el riesgo pidiendo disculpas. Todo el mundo comete errores. Pero no. Decidió ir de chulo en Twitter y pasar de todo. En un partido posterior, hizo el gesto de enfundarse los revólveres después de anotar una canasta y continuó con las bromas apuntando con los dedos a sus compañeros. Todos se rieron mucho, menos el comisionado de la NBA, David Stern, experto en castigar a los jugadores cuando nota que se toman a broma las normas.

Stern le ha sancionado con una suspensión indefinida de empleo y sueldo. Indefinida quiere decir que es poco probable que vuelva a jugar esta temporada. El club ha apoyado el castigo. Es el mismo equipo que dejó de llamarse Washington Bullets cuando su dueño decidió a mediados de los 90 que daba una imagen negativa en una ciudad castigada por la violencia.

Ahora se va a ahorrar mucho dinero. De entrada, Arenas puede perder diez millones de dólares si no vuelve a jugar hasta la próxima temporada.

Arenas es un excelente jugador. No del tipo con el que se puede ganar un anillo, pero un gran anotador, 22,6 puntos de media esta temporada, 22,7 desde que llegó a la NBA en 2001. En los últimos dos años ha pasado demasiado tiempo lesionado y su carácter individualista y sueldo multimillonario lo hacían poco atractivo con vistas a un posible traspaso.

Por último, no está de más echar un vistazo a un artículo escrito por Karl Malone, creo que anterior a la sanción y quizá leído por Stern. El ex jugador de Utah Jazz es un tipo muy conservador, afiliado a la NRA y aficionado a conducir camiones (este último detalle no tiene mucho que ver pero da una idea del personaje). Malone no está contra las armas. Cómo va a estarlo si le regalaron la primera cuando tenía ocho años.

En el artículo, Malone viene a decir que Arenas ha cometido un error imperdonable y que debería ser sancionado.

Y eso es lo que ha ocurrido.

Posted by Iñigo at 01:47 AM | Comments (2) | TrackBack

Diciembre 22, 2009

El valor de Pau Gasol

Paul Gasol está a punto de renovar con Los Angeles Lakers hasta 2014. No es una decisión sorprendente. Desde que llegó al equipo, han jugado dos finales consecutivas, han ganado un anillo y han comenzado esta temporada como terminaron la anterior. Para terminar de aclarar las cosas, Gasol faltó por lesión en los primeros partidos y su reaparición marcó la diferencia: sólo han perdido un encuentro desde entonces.

Los excelentes números de Marc Gasol y la sorprendente buena marcha de los Grizzlies han hecho que resurja el famoso debate sobre el traspaso de Pau a los Lakers. En realidad, antes no había ninguna discusión. El veredicto generalizado era que Memphis había hecho el peor negocio de la historia. Algunos entrenadores del Oeste se consideraban indirectamente estafados. Era un regalo que desequilibraba el equilibrio del poder en la Liga, en favor de los Lakers, naturalmente.

Volviendo al juego de Marc, Matthew Yglesias comenta que quizá en el futuro el intercambio de jugadores de ese traspaso no parezca tan desequilibrado. En los comentarios, hay algunas opiniones interesantes, como el que apunta que los Grizzlies ya sabían algo del potencial de Marc. De lo contrario, no habrían pagado tanto dinero a un jugador extranjero de segunda ronda del draft.

El caso es, se ponga como se ponga Yglesias, no hay debate. Para confirmarlo, le volvieron a sacar el tema no hace mucho a Greg Popovich, el entrenador de los Spurs de San Antonio:

Pop, no surprise, still sees that deal as a watershed. "Pau Gasol changed the landscape of basketball in the NBA, as far as the west is concerned, and championship caliber basketball. He's a great player, perhaps the most versatile big man in the league right now, and it makes them really, really good."

Andy then asked him if the development of Pau's lil' bro [little brother] in Memphis makes the deal perhaps a little less lopsided. Marc has, after all, become a very good NBA player down in Memphis, and is still very early in his career. Maybe, just maybe, it was a more equitable swap than he originally thought?

"Please," he said with a sarcastic eye roll. "Please."

Es decir, no hay debate. Si un entrenador rival dice que el fichaje cambió el panorama de la NBA por unos cuantos años, es que no hay duda.

Posted by Iñigo at 01:14 AM | Comments (1) | TrackBack

Noviembre 23, 2009

El circo de Kobe

Una canasta de Kobe Bryant... por detrás del tablero. Tan genial como ilegal, por lo que aquí dicen.

Posted by Iñigo at 09:46 PM | Comments (2) | TrackBack

Noviembre 17, 2009

Brandon Jennings

Brandon Jennings, 55 puntos en un partido. Al final del primer cuarto, había anotado cero. Ningún 'rookie' de la NBA había tenido tantos puntos desde hace 40 años. Un tal Kareem Abdul-Jabbar consiguió 51 en 1970.

Jennings se saltó la universidad y dio un doble salto mortal para comenzar su carrera profesional en Italia. No jugó tanto como quería, sus números fueron discretos y a mitad de temporada llegó a pensar que se había equivocado. Pero se ganó la experiencia y la dureza mental que nunca habría alcanzado en un equipo universitario.

Hay cosas que no cambian. Jennings, 20 años y número 10 en el último draft, es otro ejemplo de la ceguera de los entrenadores norteamericanos con respecto al baloncesto europeo. A fin de cuentas, para fichar a un novato en la NBA hay que intentar descubir su potencial, no lo que puede producir en ese momento. Y eso no es tan sencillo. Es aún más difícil si directivos y entrenadores, como explica el blog The Painted Area, no se molestan ni en descargarse los partidos de la web de la Euroliga.

Posted by Iñigo at 12:38 PM | Comments (1) | TrackBack

Noviembre 14, 2009

Los mates no lo son todo

La gente piensa que si un jugador de baloncesto mide más de dos metros tiene que ser capaz de hacer un mate. De hecho, hay muchos que sin llegar a esa estatura pueden hacerlo con sorprendente facilidad. Pues no es tan sencillo. En el NYT, un artículo nos da algunos ejemplos singulares. El mejor es el de Jason Kapono, de los 76ers, que nunca ha machacado el aro, excepto en entrenamientos. Altura: 2,03.

No hay que condenarlo a la hoguera ni acusarle de perezoso. Sencillamente, no es su juego.

La obsesión por el 'slam dunk' es una de las cosas que hace tan espectacular a la NBA. También es una de las razones por las que el juego a veces es tan pobre y previsible desde el punto de vista colectivo, porque todo se reduce a aclarados para que la estrella del equipo penetre en la zona y finalice él solo la jugada, si puede ser, con un mate 'in your face'. Los resúmenes de la semana están llenos de estas imágenes.

El artículo cita otros casos curiosos. El que fue pivot de los Bulls y los Knicks, Charles Oakley (2,06), se pasó tres temporadas sin anotar un solo mate. No lo necesitaba. Pivot poderoso, aunque no muy alto, su especialidad era la defensa y tenía un tiro de cuatro o cinco metros muy efectivo. También habla del argentino Fabricio Oberto (2,08) que con el TAU tuvo la ocasión de hacer muchos mates. Pero en estos últimos años de su carrera deportiva se ha especializado en tareas de intendencia y los sistemas de ataque de sus equipos nunca pasan por él.

Dicho esto, hay mates que con razón levantan a todo el mundo del asiento. Esta jugada de Dwyane Wade (1,93) ya es de momento el mate de la temporada. Todo empieza por cierto con un tapón a LeBron James y acaba con Wade elevándose sobre Varejao (2,11).

No sólo de mates viven las estrellas. Hace unos días, los Spurs jugaron contra Toronto sin Duncan ni Parker. Derrota segura, pensarían muchos. No, si tienes a un jugador como Ginobili: 36 puntos (en 32 minutos de juego), 8/15 en tiro con 6 triples, 8 asistencias ¡y 4 tapones! Grande Manu.

Posted by Iñigo at 02:17 PM | Comments (2) | TrackBack

Noviembre 03, 2009

Steve Nash

Los Suns de Phoenix ya no son lo que eran hace unas pocas temporadas. Pero Steve Nash, .

Posted by Iñigo at 03:12 AM | Comments (1) | TrackBack

Octubre 26, 2009

La NBA llama a la puerta

La NBA está a punto de comenzar, así que es obligado consultar la previa (casi tan larga como toda la temporada) que escribe Bill Simmons en ESPN con su teclado 'destroyer' de costumbre (primera y segunda parte). Algunas de sus invectivas:

--Ron Artest es el jugador más pirado de la historia de la Liga. La va a armar en los Lakers, seguro. Más sobre esto, luego.

--Los Spurs vuelven a ser candidatos (en realidad con C mayúscula), incluso si Ginobili no se termina de recuperar. Con Antonio McDyess, Richard Jefferson y DeJuan Blair, Tim Duncan sí tiene esta vez una plantilla de primerísimo nivel. Y Duncan no va a estar ahí siempre. Quizá sea su último año como el mejor cuatro de la Liga.

--Rasheed Wallace es una aportación muy interesante para los Celtics. Lo que tienen garantizado es que van a batir todos los récords históricos de técnicas. Pero Kevin Garnett no será el mismo después de la lesión de rodilla. Todos los hombres altos que pasan por eso no recuperan la explosividad y la potencia anterior.

--Shaquille O'Neal está gordo como una vaca y no le conviene nada al juego de Cleveland: "He's so fat that it's like looking at one of those TVs where the HD is screwed up so it makes everyone seem wider". ¿Importa mucho si tienes a LeBron? Debería. O quizá no.

--Vince Carter nunca ha jugado en un equipo realmente bueno. Ahora que está en Orlando, las cosas cambian.

--Los Clippers apuntan a equipo revelación (What?) Blake Griffin es un número uno del draft que va a ser la bomba.

--Los jóvenes talentos de Portland terminarán hartándose de Nate McMillan.

--Es más fácil que Utah apruebe el matrimonio gay que Iverson, Mayo, Gay y Randolph formen un equipo en Memphis. Es lo malo de jugar con un solo balón cuando todos quieren tirar. Lo que nos lleva a que Rudy Gay será el fichaje sorpresa de mitad de temporada de algún equipo que quiere dar un salto de calidad para acercarse al título. O eso o terminan matándose entre todos.

--Charlotte, Memphis, Sacramento, Indiana, Milwaukee, Filadelfia y Minnesota. Clubes cuyos dueños estarían encantados de ponerlos a la venta. Las pérdidas económicas son ya cuantiosas. La próxima renovación del convenio entre jugadores y NBA pinta tan mal que no hay que descartar otro cierre patronal.

Hasta aquí, Simmons.

Para los que creen que se pasa con Artest (cierto, está como una cabra pero puede aportar mucho al equipo en defensa), en el blog angelino Forum Blue & Gold están tranquilos. En la pretemporada, Artest lo ha hecho todo bien, sobre todo en defensa, lo más importante, porque lo han fichado para ser el antiLeBron. En ataque, ha buscado a sus compañeros y se ha controlado bastante (es un jugador de horribles porcentajes de tiro). No se pegará con Kobe para tener el último tiro. ¿Seguro? Dicen que Artest es un tipo encantador fuera de la pista pero dentro es un espectáculo no siempre agradable para el equipo que le paga.

En su momento, la mayoría de los analistas dijeron que los Lakers habían cometido el error del siglo al dejar marchar a Ariza y sustituirlo por Artest... después de haber ganado el anillo. Veremos quién tiene razón.

De todas formas, la clave para los Lakers es el estado de salud de Bynum. En teoría, no, porque ya ganaron sin él. Pero con él es difícil intuir cómo les puede ganar alguien. Nadie tiene a un trío de hombres altos como Gasol, Odom y Bynum, no sólo por altura, sino por la combinación altura + velocidad. En el baloncesto, el tamaño aún importa.
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Los que aún quieren más: análisis equipo a equipo.

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Octubre 17, 2009

Andrés Montes

Ha muerto Andrés Montes, excelente comentarista de partidos de baloncesto. Habría que llamarlo periodista, locutor, comentarista y animador al mismo tiempo. Montes era muy intuitivo al hablar de baloncesto y eso era una gran virtud que venía acompañada de la inevitable dosis de defectos. ¿Quién no los comete en televisión cuando hay que retransmitir con pasión y reaccionar al segundo?

Coincido con lo que escribe Vicente Salaner. La la NBA en España debe mucho a Ramón Trecet y Montes. Ellos entendieron qué tipo de retransmisión había que hacer. Los que les han imitado no han llegado a su nivel ni de lejos:

La NBA es lo que es en España por la impronta que le han dado dos comentaristas televisivos originales, irrepetibles y, desde luego, polémicos: Ramón Trecet primero, y luego Andrés Montes. Ellos entendieron y transmitieron el carácter espectacular, teatral incluso, circense a menudo, de un deporte que en la NBA se transforma en otra cosa bien diferente de lo que el baloncesto es en Europa.

Es curioso. Trecet y Montes sabían mucho de música y se notaba en las retransmisiones. Y tenía toda la lógica del mundo.

Como periodista deportivo, tenía principios, lo que está bien. Había un tipo de baloncesto que le gustaba y lo apoyaba constantemente. Apostaba por el juego que da espectáculo, que es a fin de cuentas el que lleva gente a las canchas y el que sostiene el negocio. No es, seguro, el baloncesto que da títulos, pero eso es cosa de entrenadores. Es ciero que hay muchos aficionados que quieren ganar por lo civil o por lo criminal. También están los que sólo aman un deporte o sencillamente están enganchados a él, con su equipo de toda la vida si acaso. Por encima de todo, quieren disfrutar con el juego. Lo mismo que Andrés Montes.

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Septiembre 20, 2009

La leyenda

Tres partidos decisivos, tres palizas. Francia, Grecia y finalmente Serbia se han rendido ante la mejor selección europea de baloncesto. El campeón es el equipo que gana la final --toma pensamiento profundo--, y a veces la diferencia entre dos selecciones en un encuentro es ínfima. Puede reducirse a lo que ocurre en los últimos diez segundos. Y a veces, una final es simplemente el último en una secuencia de partidos. Tocaba ganar a Serbia como antes se hizo con otros.

La superioridad ha sido absoluta. Es verdad lo que han dicho en la retransmisión. Ha sido como cuando ganaba Indurain. En concreto, como ese Tour que arrancó en seguida con una contrarreloj en la que el navarro le metió cerca de tres minutos al segundo clasificado. Sin contestación desde los primeros minutos. Con el rival con la mirada perdida desde el minuto cinco, y eso siendo generosos. Los jóvenes serbios ya tenían motivos para estar orgullosos de su labor por el simple hecho de llegar a la final. Podían habérselo tomado como un premio, una forma de disfrutar del momento sin sentirse condicionados por el resultado. Para ellos, en vez de una fiesta, la final parecía una penitencia. Después de lo que hemos conseguido, ¿por qué nos hacen pasar este trago? ¿Es que no tiene piedad la organización?

La leyenda de esta generación de jugadores continúa bajo la batuta del mejor jugador español de todos los tiempos. El campeonato comenzó mal y quizá algunas críticas le dolieron pero Pau Gasol no se dejó llevar ni por la desesperación ni por la soberbia. El talento y la profesionalidad pueden ir unidos.

Un mensaje interesante, dado que para los deportistas profesionales lo suyo es un trabajo. Los que tienen más talento también tienen días malos. Pueden echar la culpa a sus compañeros menos brillantes, buscar excusas o apelar a la mala suerte. Gasol --también otros de sus compañeros-- no es de esos. Admite sus errores y trabaja desde el primer minuto con la intención de corregirlos cuanto antes.

Y no olvida que el baloncesto, como muchos de nuestros trabajos, es un juego de equipo.

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Todo pinta muy bien

Parece mentira que ocurrieran tan pocas cosas reseñables (por sorprendentes) en la semifinal que España ganó a Grecia. Si acaso, la poca producción de Spanoulis. Más que a un día malo, se debió a la estupenda defensa de equipo de la selección. Comenté en el partido que se ganó a Francia que Ricky había estado muy bien en la defensa sobre Tony Parker. Cierto, pero no del todo cierto. En realidad, cuando Parker se iba de Ricky se encontraba con las ayudas correspondientes de otros jugadores. No sólo no le dejaban penetrar, sino que le impedían sacar el balón con facilidad. Francia quedó cortocircuitada y lo mismo le ocurrió a Grecia. Los griegos sólo hicieron bien aquello que a priori se sabía que podían hacer bien, el rebote de ataque, y no les sirvió de nada.

Con Serbia será diferente. No se basan en un sólo jugador sino en un equipo. En cada partido, se han ido alternando los jugadores que llevaban el peso del equipo en ataque. Su defensa es buena, pero pocos creen que pueda frenar a España.

La derrota en la primera fase sólo demostró que los españoles no habían iniciado el campeonato con la intensidad necesaria y que algunos de ellos no tenían aún el ritmo apropiado al salir de lesiones.

Ahora ya es otra cosa evidentemente. Haber jugado antes contra Serbia le viene muy bien a España porque hay poco margen para la sorpresa. Los serbios son jóvenes, sí, pero muy buenos. Han llegado mucho más lejos de lo que se creía y pueden jugar disfrutando del momento. En cierto modo, ya han triunfado. De hecho, es posible que Serbia sea la España de dentro de dos o cuatro años, la potencia dominadora del continente.

Es posible pero aún estamos en 2009. Confíemos en que se note dentro de unas horas.

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Septiembre 19, 2009

Cuando se está más calentito en el 'infierno'

Ya sabemos que España se las verá con Grecia en las semifinales del Europeo de baloncesto. Los griegos han ganado en la prórroga por 76-74 a Turquía. Spanoulis ha estado imperial, 23 puntos y 7 asistencias, lo que tampoco es una novedad.

Spanoulis tuvo su paso, nada brillante, por la NBA en los Houston Rockets. Vio que pasaba más tiempo en el banquillo que en la pista y decidió que lo mejor era volver a su país, donde es un héroe.

Algo parecido le pasó a Juan Carlos Navarro. Disfrutó de mejores números y de más elogios de los cronistas de baloncesto, pero la experiencia no le salía a cuenta ni económica ni deportivamente. También se cogió un billete de vuelta a casa. BeingBeen there, done that, como dicen en EEUU.

También dejó a mucha gente encantada con su juego, como el autor de este blog, que explica a sus lectores, norteamericanos claro, por qué Navarro renunció tan rápido a la NBA.

The impression you get from interviews with Navarro is that he just didn’t care that much about the NBA. He loves Spain. It’s his home. And versus the States, where there will be constant questions about his style, his ability, and his talent simply because he hasn’t played in the AAU tournaments or Rucker Park or the NCAA Tournament, in Spain, he’s considered mega-successful. Would you rather be a pauper in heaven or a prince in Hell?

Por cielo, hay que entender aquí la mejor Liga de baloncesto del mundo. Por infierno, cualquier otra Liga.

Y sigue con esta frase genial:

What if Hell was actually your home, and instead of the brimstone pits, it was nice beaches, beautiful women, amazing food and way more money than you can make in heaven?

Playas, chicas guapas, comida y dinero. Dónde va a parar. El infierno es mucho mejor.

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Septiembre 18, 2009

La versión excelente de España

Al final, no era para tanto, ¿no?

La selección española de baloncesto ha pasado por encima de Francia como si el mal inicio del campeonato hubiera sido sólo un mal sueño. Todos los presagios negativos se fundieron en cuestión de minutos. La mejor defensa del campeonato encajó 25 puntos en el primer cuarto. La defensa española alcanzó el nivel de perfección que se espera de un equipo que es favorito para el oro. Tony Parker no se comió a los tres bases españoles. De hecho, fue suficiente con que Ricky le tuviera controlado. El base de los Spurs terminó diluyéndose y casi no era necesario ni marcarle. Y Pau Gasol ofreció la versión All Stars: 28 puntos, 9 rebotes e intimidación permanente en las dos zonas.

86-66 es un excelente resultado. Aún mejor fue el estilo de juego en los dos lados de la canasta. El mensaje fue determinante. A un equipo con muy buena defensa le llegó alto y claro: nosotros podemos defender tan bien como vosotros y además podemos meter 70, 80 o 90 puntos. Los que sean necesarios. Serbios, griegos y turcos habrán tomado nota.

El juego de España ante Serbia y Turquía sólo inducía a la depresión. Evidentemente, esto es otra cosa. Es la versión que ya conocíamos. Buena defensa y muy buena en los momentos clave del partido. Transiciones rápidas que no tienen que acabar en un contraataque claro para ser efectivas. Buena circulación de balón para que los tiradores exteriores tengan posiciones de tiro cómodas (dentro de lo que cabe en un Europeo). Gasol recibe la pelota en la zona en el momento adecuado.

Todo salió de seda, tanto que entra la duda. ¿Jugó muy bien España o muy mal Francia? ¿O las dos cosas? Está claro que los franceses nunca creyeron que podían ganar este partido. Griegos y turcos serán más correosos. Los serbios, tan jóvenes ellos, dependerán de cómo se levanten ese día. Ya han ganado a Rusia en cuartos.
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Los cálculos sobre los cruces posibles cuando se está jugando la primera fase sólo sirven para alimentar especulaciones en las páginas de la prensa y en las retransmisiones. Si quieres jugar una final tienes que ganar a los mejores.

Sin embargo, a veces ocurren cosas. Es obvio que nadie quería enfrentarse a España en cuartos. Tampoco hay que ser idiota. El partido Francia-Grecia, el último de la primera fase, pareció un poco sospechoso, según las crónicas. Era probable, pero no seguro que el que ganara se las vería con España en cuartos.

Parker no jugó en todo el último cuarto. En total, sólo estuvo en cancha durante 21 minutos. Raro, ¿no? Spanoulis, que ha estado inmenso en todo el campeonato, penetró pocas veces y estuvo más estático de lo habitual. Aun así, acabó con 16 puntos, sobre todo gracias a los triples. A 10 segundos del final, Spanoulis empató el partido con un triple ¡desde nueve metros y con un pivot pegado a él! La metió, sí, pero no parece la jugada que elegiría un entrenador. Claro que con tipos como Spanoulis todo es posible. Un jugador francés de banquillo, De Colo, anotó la canasta definitiva en los últimos segundos. Y los franceses no celebraron la victoria de forma muy, digamos, intensa. Como se ha visto ahora, con razón.

Hay otros ejemplos curiosos que no tienen nada que ver con sospechas, sino con estropearlo todo en el último momento. Turquía, imbatida hasta entonces, tenía que ganar a Eslovenia para meterse en el lado amable del cuadro, y así no enfrentarse a España o Grecia hasta la final. Perdió por dos puntos. Ahora se las verá con Grecia en cuartos y si sale viva con España en semifinales.

Conclusión: lo de los turcos tiene más delito que lo de los franceses.
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Bola extra: los mejores mates de Kobe Bryant (con su análisis crítico).

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Septiembre 13, 2009

Suicidio

Cuanto más lo pienso menos lo entiendo. Última posesión ante Turquía, un punto abajo, sólo un ataque, ninguno de los tres bases en pista... y todo acaba en una carga suicida de Llull ante una defensa turca formada por gigantes que han sellado su zona durante todo el partido. Como siempre en baloncesto, cuando todo se juega a una carta el análisis depende del desenlace. Si sale bien, ha sido una jugada maestra que el contrario no esperaba. Si sale mal, ha sido una ocurrencia que se podían haber ahorrado.

No vi los tres primeros partidos de la selección en el Europeo de Polonia. Por lo que leí, supuse que el equipo está jugando mal, hay jugadores que físicamente no han podido estar a su nivel y las ideas tácticas no están del todo claras. No hay transiciones rápidas y el juego no es tan fulgurante como en los anteriores campeonatos. Si no hay piernas, es difícil esperar mucha velocidad.

Turquía es mejor selección que lo que se vio ayer. Jugaban contra el gran favorito y se aplicaron a una defensa brutal. Suponían con buen criterio que en el juego abierto y veloz no podrían hacer frente a España. Es lo mismo que hizo Argentina en el Mundial y estuvo a punto de salirles bien. Hay que recordar que Nocioni falló un triple esquinado casi en el último segundo que podría haberlo cambiado todo.

Lo malo a veces no es perder sino cómo se pierde. Mala, muy mala, circulación de balón, cansacio de jugadores clave, pésima selección de tiro, un base titular que tiene muy poco tiro y que es demasiado joven (por lo que lógicamente tiene que alternar buenas jugadas con errores evidentes)... No todo está perdido, pero las vibraciones no son buenas.

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Junio 26, 2009

El destino de Ricky Rubio

ricky rubio.jpg

La elección de Ricky Rubio en el quinto puesto del draft de la NBA (por Minnesota Timberwolves) se ha convertido en una especie de anticlimax. Y no porque no se hayan cumplido los pronósticos que le colocaban en el segundo o tercer puesto, que también, sino porque las posibilidades de que cruce el charco la próxima temporada se han reducido bastante. Los sueldos de los mejores puestos del draft están ya tasados por las normas de la liga. A Rubio, su familia y su agente, las cuentas les salían si era elegido entre los tres primeros. No tanto de ahí para abajo a causa de la elevada cláusula de rescisión del jugador.

Rubio tiene previsto vivir en EEUU con sus padres y parece que no les gusta mucho el frío. Eso en Minnesota es algo más que un problema. Si descontamos Alaska y alguna zona de Dakota, no hay ningún sitio allí con temperaturas tan bajas y un invierno tan largo como el hipotético destino de Rubio. Y él ya lo ha comentado, aunque en tono humorístico.

En las primeras declaraciones tras el sorteo, y eso que suelen ser protocolarias, Rubio se mostró algo ambivalente, y lo mismo su padre. Parece que están esperando que se produzca algún movimiento en forma de traspaso.

Lo más extraño es que los Wolves eligieron en primera ronda a otro base, Jonny Flynn. ¿Dos 'rookies' para el puesto de base? Imposible. Sin embargo, el club insiste en que ha elegido a Rubio para quedárselo. De hecho, su plantilla sufre de un exceso de hombres altos y una alarmante escasez de bases y escoltas.

Esos no eran los planes del jugador ni de su agente. Vicente Salaner comenta que a Rubio le ha perjudicado que su agente no permitiera que se enfrentara directamente a otras promesas del draft en entrenamientos organizados por los equipos. Es posible que eso haya retraído a algunos clubes. Cuando estuvo en Sacramento, Ricky estaba pasando una gripe o catarro bastante fuerte y no parecía en las mejores condiciones posibles.

En el apartado de virtudes y defectos, de Rubio se ha dicho en la prensa norteamericana, además de una tonelada de elogios, que su punto débil es el tiro exterior y la propia mecánica de tiro. Es otro factor que quizá hayan tenido en cuenta. Siempre se dice que los bases deben saber tirar para abrir las defensas rivales, aún más en la NBA, donde las defensas en zona son peores que en Europa y muchos equipos defienden básicamente convirtiendo su pintura en un campo de minas lleno de músculo. Luego a la hora de la verdad ves que hay muchos equipos que cuentan con bases que son tiradores muy discretos o tremendamente irregulares.

Pero ya digo que los elogios han sido generalizados. El columnista de The Washington Post Michael Wilbon se tiraba de los pelos (bueno, los de la barba) al ver que los Wizars no habían podido elegir a Rubio. Claro que un periodista que sigue a los Wizards está acostumbrado a sufrir.

La gran esperanza de Rubio es que los New York Knicks se decidan a pujar por él. Se ha hablado mucho de esta opción, pero a esta hora no hay nada. Como ya viene siendo habitual, los Knicks preparan otra limpia de jugadores esta vez bajo la batuta del entrenador Mike D'Antoni, que conoce bien el baloncesto europeo. D'Antoni ya demostró en Phoenix lo que le gusta el baloncesto de transiciones rápidas y la velocidad de Rubio encaja perfectamente en sus ideas. Pero, ay, Dios mío, ya sabemos que los Knicks son una de las organizaciones, empresas o instituciones peor gestionadas de la historia, después del Partido Comunista de la URSS y la General Motors.

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Junio 11, 2009

Gasol y el juego de ataque de los Lakers

En el blog de baloncesto de ESPN hay una excelente y detallada descripción del juego de ataque de Pau Gasol en las finales de la NBA. O mejor dicho de la (in)capacidad de los Lakers de aprovechar su talento y, sobre todo, su ventaja en la zona frente a Rashard Lewis. Cuando se habla de este tema en la prensa y televisión españolas, hay mucho de patriotismo confundido y pasión desmedida. Los datos descritos en TrueHoop llevan la discusión a un terreno más objetivo.

Cuenta que Gasol estuvo en cancha en el tercer partido en 73 posesiones de ataque de los Lakers. Tocó el balón en 33 de ellas, aunque sólo en 25 tuvo la ocasión real de ir a canasta, lanzar o dar un pase que podría terminar en canasta. ¿Cómo terminaron esas 25 posesiones? Nueve canastas de Gasol, dos fallos en tiro, tres faltas recibidas que acabaron en tiros libres, nueve tiros de compañeros (con tres canastas) y dos pérdidas cometidas por otros Lakers.

Lo que no dice el artículo es que en ocasiones, sobre todo en los dos últimos cuartos, el español se ofreció poco a sus compañeros, aunque hay que decir que el contrario también juega. Conscientes de su inferioridad en la pintura, los Magic se cierran en defensa con bastante precisión sin importarles a veces permitir tiros de tres. Hay mucho tráfico en la zona y ya sabemos que en los play-off se defiende con mucha más dureza.

No cabe ninguna duda de que los Lakers no están aprovechando su ventaja en el juego interior, y eso incluye dar más balones a Gasol o crear situaciones en las que el jugador catalán pueda rentabilizar su altura sobre Lewis o su juego de espaldas al aro frente a Howard. A los Magic les conviene correr, correr y correr para aprovechar el extraordinario dinamismo de jugadores como Alston, Turkoglu y Lewis (por cierto, qué bueno es Turkoglu). Los Lakers tienen que jugar sus cartas.

Al final, como casi siempre en el juego ofensivo, todo se reduce a la circulación de balón. Cuando es pésima en los Lakers (y lo ha sido varias veces en los play-off, en toda la eliminatoria ante Houston y al comienzo contra Denver), Gasol tiene que extraer las canastas como si fuera un minero sacando carbón. Si es buena, la presencia de Gasol en ataque aumenta.

Las características del juego de Gasol, su gran mejora con respecto a las finales del año pasado (ya no le llaman Gasoft) y sus números en esta serie (23 de 37 en tiros de campo, 17 de 19 tiros libres) confirman que el juego de ataque de su equipo debería contar más con él.
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Cuánto se echa de menos a Andrés Montes en las retransmisiones de Digital+. Tampoco ayuda mucho que Daimiel aparezca más circunspecto de lo habitual en él. Quizá sea por los comentarios lamentables de sus dos compañeros. Me resulta especialmente inaguantable ese desprecio que muestran por Stan Van Gundy, el entrenador de Orlando. Sí, es gordo, lleva bigote, no va vestido de forma elegante y ha cometido algunos errores en esta eliminatoria (como Phil Jackson, los jugadores o los árbitros). Sin embargo, es un gran entrenador, con un excelente porcentaje de victorias en la liga, un 67% en dos temporadas con Orlando) y ha llevado al equipo a una final a la que no estaban invitados tras derrotar a Boston y Cleveland en eliminatorias apasionantes.
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Qué ocurre cuando Kobe conecta con Gasol.

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Marzo 05, 2009

Darwin no jugaba al baloncesto

shaq tiro libre.jpg

Cualquiera que haya visto unos cuantos partidos de baloncesto, especialmente en play off, sabrá la cantidad de ellos que se deciden por los tiros libres. Los comentaristas de televisión lo suelen recordar incluso cuando todavía restan varios minutos para el final. Los entrenadores justifican muchas de sus derrotas por los fallos en los únicos tiros en los que el jugador no tiene a nadie delante, mucho menos poniéndole una mano delante de la cara.

Hay jugadores con porcentajes horrorosos o nada brillantes que han conseguido mejorarlos con el paso del tiempo. Otros, también con mucho esfuerzo, han alcanzado niveles de perfeccion casi insuperables. El caso más reciente es el de Calderón, que ha estado a punto de romper un récord histórico en la NBA. Y luego están, para oprobio y burla general, los que se han pasado toda su carrera sufriendo desde la línea. Shaquille O'Neal, claro.

Y sin embargo, lo más llamativo de ese lanzamiento es que en las últimas décadas, al menos en el baloncesto norteamericano, la media general de acierto en el tiro libre se ha mantenido estable, como si una maldición impidiera mejorarla. En el NYT explican cómo en 50 años no ha habido ninguna alteración en el porcentaje:

In the National Basketball Association, the average has been roughly 75 percent for more than 50 years. Players in college women’s basketball and the W.N.B.A. reached similar plateaus, about equal to the men, and stuck there.

The general expectation in sports is that performance improves over time. Future athletes will surely be faster, throw farther, jump higher. But free-throw shooting represents a stubbornly peculiar athletic endeavor. As a group, players have not gotten better. Nor have they become worse.

Pensemos en todos los deportes y en la evolución que han tenido sus récords y estadísticas en 50 años. No ha habido límite que no se haya podido superar y, excepto en el caso de Bob Beamon, todos mucho antes de lo que los expertos preveían.

Quizá la explicación resida en que los tiros libres no dependen de la fortaleza física del deportista, sino de la mental, y en ese aspecto 50 años no suponen un plazo de tiempo significativo. No ha habido una evolución mental que marque la diferencia, a pesar de que en baloncesto los cambios de todo tipo en ese plazo de tiempo han sido espectaculares. Da igual que los jugadores tuvieran antes salarios de subsistencia, y que ahora muchos sean multimillonarios. Que estén limpios como una virgen o dopados hasta las cejas. Que jueguen delante de 2.000 personas o ante una multitud. Al final, el jugador está ahí solo delante de sus demonios personales, de eso que llaman los nervios.

Para algunas cosas, 50 años es poco tiempo.

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Febrero 23, 2009

El TAU, campeón de la Copa

Puede que estuviera en el pronóstico pero desde luego la actuación ha estado por encima de las mejores expectativas. El TAU ha ganado la Copa al Unicaja por 100-98 en un partido que se recordará durante mucho tiempo. Un partido, además, que se decidió por nada, por una diferencia casi microscópica entre los dos equipos.

El partido tuvo una defensa excepcional (y eso que el tiempo reglamentario acabó con un empate a 87, un resultado nada corto), los árbitros dejaron jugar todo lo que pudieron, los jugadores que tenían que marcar la diferencia tuvieron su momento de gloria y todos se vaciaron hasta extremos que pocas veces se ven en una pista de baloncesto.

Parece imposible que después de tres jornadas de baloncesto dos equipos puedan llegar a tales niveles de exigencia física. Los entrenadores demostraron de sobra por qué no conciben una victoria que no esté basada en una defensa extenuante. En el catecismo de Aito e Ivanovic no se toleran los tiros fáciles ni las bandejas. Si tienen que mover el banquillo constantemente, lo hacen sin consideraciones a las estrellas. Cuando algún jugador se sale del manual, pierde la cabeza o descansa en defensa para estar fino en ataque, se vuelve al banquillo como un cohete. En otros equipos en seguida están poniendo malas caras. En TAU o Unicaja, o en los equipos que dirige Ettore Messina, no hay margen para la discusión. Por eso, están en lo más alto en casi todas las temporadas.

Rakocevic lo descubrió a los tres minutos de comenzar el partido. Lo había iniciado ansioso por anotar y con penetraciones atolondradas en la zona. Resultado: al banco. No fue el único. El TAU descubrió inmediatamente que el Unicaja ni estaba condicionada por las doce derrotas anteriores ante su rival ni se dejaba impresionar por el cartel de su oponente. En el primer cuarto, se cobró seis recuperaciones de balón, una cifra extraordinaria. Defendía las líneas de pase con tal ferocidad que al TAU le costaba armar dos pases seguidos.

El primer cuarto acabó 18-17 para el TAU. El favorito tiró de talento individual porque el mejor juego de equipo era del Unicaja. (Y eso que el director de la revista Gigantes dijo en la tele antes del partido que el TAU era más físico que talento, menudo crack).

El segundo cuarto podría haber servido como un periodo de desgaste o incluso de descanso de cara a minutos más decisivos. No tanto. Algún entrenador dirá que las defensas bajaron un poco el nivel (el parcial fue de 25-27), pero hay tiros, como los de Teletovic, que no se pueden defender. Fue un intercambio de golpes de alta escuela. Los malagueños continuaron defendiendo con la máxima intensidad. Su principal víctima fue Splitter, que anotó ni un solo punto en la primera mitad.

El único punto débil del Unicaja era el lanzamiento de tres en el que tenía porcentajes ridículos. Comenzó con un uno de diez y llegó a estar dos de 17. La pintura era una zona prohibitiva en ambos aros, pero los fallos en los tiros de tres no dejaban opción a Unicaja. Ahí se vio, al igual que en otros instantes en la Copa, que Archibald es capaz de sostener a su equipo durante largos periodo de tiempo. Aito ha conseguido que Archibald dé un salto de calidad. En el Joventut era un jugador muy valioso centrado en tareas de intendencia. Ahora es otra cosa.

En los dos últimos cuartos, parecía que Unicaja estaba cerca de ceder. La apisonadora del TAU, a la que ya comenzaba a unirse Mickael, estaba a punto de triturar al rival. ¿Resistiría éste 35 o 37 minutos? Ésa era la duda cuando una jugada de cinco puntos (triple más dos tiros libres por una falta) desequilibró el marcador. Otro triple de Rako puso un 77-69 que podía ser el comienzo de la victoria.

Quizá en un partido de Liga, sí. No en esta Copa. Con la tensión al límite, y algunos jugadores tremendamente cansados sin poder llegar a tiempo a las acometidas al rival, los árbitros elevaron el nivel de exigencia y no dejaron pasar ni una. Los últimos cinco minutos, menos espectaculares que el resto del partido, fueron una sucesión de tiros libres. Ahí el Unicaja no falló y el TAU tampoco mucho, aunque dos tiros libres fallados por Sergi Vidal dieron aún más energía a los malagueños. Splitter irrumpió en escena y, ahora sí, impuso su ley en la zona. No falló ningún tiro libre, lo que no es su especialidad.

Aito, siempre Aito, alteró las coordenadas de los cambios con una de las suyas. Mantuvo a Gomis constantemente en cancha y dejó en el banquillo a Carlos Cabezas, que quizá no podía seguir este tremendo nivel recién salido de una lesión. Y Gomis, otro jugador hasta ahora enclavado en la clase media de la Liga, no se achantó lo más mínimo ante Prigioni. Falló algunos tiros, sí, pero acertó otros decisivos.

Cualquier rebote o tiro podría haber desequilibrado la Copa. La igualdad era tanta que casi fue un acto de justicia que el partido necesitara de una prórroga.

El TAU se quedó de inmediato sin Splitter y Rakocevic. No importó. Toda la prórroga fue propiedad de Mickael. Forzó la quinta de Jiménez, anotó bajo el aro, luego repitió en un tiro de media distancia con el defensor pegado y finalmente taponó el último tiro de Berni. Todos los demás estaban ya exhaustos. Maltrató al Barça en la final de la pasada temporada y lo ha vuelto a hacer con el Unicaja en esta final. Hay un límite para la resistencia humana que este jugador no conoce.

Fue la sexta Copa del TAU. La sexta en 14 años. No es mala marca.

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Agosto 24, 2008

El mejor espectáculo del mundo

Los grandes partidos de baloncesto te dejan tan conmocionado que es complicado valorarlos inmediatamente. Son momentos para la hipérbole. Luego se empiezan a descubrir defectos y se colocan las cosas en su justa medida. Por eso, de entrada me parece que hemos visto el mejor partido de baloncesto de unos Juegos Olímpicos. Rebusco en mi memoria y me entran dudas al recordar la victoria de la URSS sobre EEUU en los Juegos de Seúl. Los partidos del Dream Team en Barcelona no valen. Para que un enfrentamiento sea memorable, para que sea un auténtico combate, los dos equipos tienen que jugar a gran altura y debe haber algún tipo de suspense en cuanto al resultado final. Es la diferencia entre un All Star Game y un partido de play off de la NBA.

Muchos jugadores de las dos selecciones podrían haber jugado mejor. Eso es lo que ocurre precisamente en los grandes partidos.

La selección de EEUU era el mejor equipo que la NBA podría ofrecer. Porque un equipo no es una sucesión de nombres como si de un ranking se tratara. Por primera vez, los norteamericanos crearon un equipo con mentalidad de equipo, lo que obliga siempre a respetar al contrario. Eso se demuestra por ejemplo cuando los entrenadores y sus ayudantes se quedan hasta las cuatro de la madrugada para examinar en detalle vídeos de la selección argentina (esta vez Krzyzewski sí se sabía los nombres de los jugadores). Y cuando los jugadores ocupan su tiempo libre en ver los vídeos que les preparan, y luego hacen saber que les han pasado el vídeo equivocado, porque algún técnico había hecho un cambiazo para comprobar que estaban haciendo los deberes. O cuando mantienen la misma mentalidad defensiva contra rivales menores.

En algunos blogs de baloncesto en EEUU ya hay comentarios que definen el partido como lo que ha sido: lo mejor que se ha visto nunca. Y allí han tenido que verlo a las dos y media de la madrugada.

Lo dicho. Memorable.

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Agosto 15, 2008

Malos augurios

Así no hay manera de terminar tranquilo unas vacaciones si uno empieza a ver partidos de la selección española de baloncesto y nota un sudor frío muy poco alentador. No pretenderán llegar a la final con esa defensa, ¿no? Convertir a los jugadores chinos en un trasunto de los clásicos tiradores serbios no hace presagiar nada bueno. Quizá sólo sea cuestión de encontrar eso que llaman ritmo de competición y aceptar que siempre hay partidos malos que se ganan con un arranque final de talento, algo de lo que estos jugadores tienen a espuertas.

Pero en cualquier caso resulta inquietante ver a Calderón, Navarro, Garbajosa, Raúl López y alguno más convertidos en sombras de los jugadores que realmente son. Hasta ahora hemos aguantado con Pau, Ricky y Rudy, además de apariciones intermitentes de otros jugadores. Con eso no se gana a EEUU y probablemente tampoco a Lituania o Argentina.

Como consuelo nos queda saber que la prensa norteamericana considera que sólo España puede poner en aprietos a su selección, no pequeñas molestias, sino auténticos problemas, de los que te pueden llevar a perder un partido.

Como no consuelo nos queda intuir que los norteamericanos han aprendido algunas, no todas, de las lecciones de sus derrotas anteriores. Los jugadores ya no están encerradas en sus residencias (en Atenas un transatlántico de lujo), y se comportan como deportistas relativamente normales. Se dejan ver por la Villa Olímpica, hablan con la gente, presencian otras competiciones... Parecen comportarse como un equipo, que es lo que no hicieron antes.

En la cancha juegan en la misma línea, no como una sucesión de superestrellas. Aún les resulta difícil defender ciertos conceptos muy básicos, como el bloqueo y continuación, pero hasta ahora no lo han necesitado gracias a una defensa extraordinaria, pero que tiene, o podría tener, algunos puntos oscuros. Juegan a robar cada pelota, a interceptar cada línea de pase, y provocan un número asombroso de robos y pérdidas. Pero si nuestros bases y aleros no se dejan intimidar y hacen circular el balón con la velocidad que acostumbran, obtendrán posiciones de tiro increíblemente cómodas. Cómodas en un sentido relativo, claro, porque estarán jugando contra EEUU.

Un detalle, por último, sobre la polémica, algo exagerada pero para nada artificial, sobre la foto de los ojos rasgados. Confieso que la primera vez que la vi sentí que estaba ante una cagada estúpida de los jugadores. Me preguntaba cómo era posible que se hubieran prestado a tal juego ridículo. Ya suponía que iba a sentar muy mal en algunos países, donde no se hacen bromas sobre las diferencias raciales, como tampoco se acepta de buena gana ni de ninguna que haya quien diga que las mujeres están para quedarse en casa fregando, y no por ejemplo formando parte de un Gobierno o de un Consejo de Administración. También estaba claro que la prensa deportiva iba a reaccionar de la forma que lo ha hecho. En los grandes acontecimientos deportivos, estos periodistas dejan de comportarse como periodistas y pasan a actuar sólo como forofos (sólo hay que ver los partidos de baloncesto en TVE).

Hay muchos que dicen que los anglosajones no tienen ningún motivo para denunciar nada, dado su tenebroso pasado en el tema racial. Precisamente por eso lo hacen. Durante mucho tiempo, el gesto de los ojos rasgados se ha utilizado por allí para ridiculizar a los pueblos orientales, sobre todo chinos y japoneses, y por eso ahora no está socialmente aceptado. Es algo que, por dar un nombre, Pau Gasol no se atrevería a hacer en Los Angeles ni en la más loca de sus borracheras, en el caso improbable de que las tenga.

Y por eso fue Gasol el primero en pedir disculpas y en reconocer que todo se debió a una idea del patrocinador, la empresa Seur, cuyos responsables de marketing, o quienes sean los imbéciles a los que se les ocurrió la idea, presionaron a los jugadores para que hicieran delante de la cámara un gesto ante el que algunos no estaban muy convencidos.

El gesto no convierte a los jugadores en racistas ni mucho menos. Sí en un grupo de jóvenes que han demostrado muy poca sensibilidad y se han dejado presionar por los que ponen el dinero, como si eso les diera derecho a obligarles a hacer el ridículo o a colocarse en una postura cuestionable.

Estas historias siempre pueden empeorar y estando la Federación Española de Baloncesto de por medio de hecho es lo más probable. Ahora dicen que estudian demandar a The Guardian por haber sacado la historia. Los mismos dirigentes reaccionarios que prohíben a los deportistas hacer declaraciones políticos durante los JJOO, no sea que vayan a reventar el negocio, se escandalizan por que la noticia aparezca fuera de España, relacionada con otros incidentes desagradables ocurridos en nuestro país. A ver si algún abogado con estudios les devuelve a la realidad.
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Un punto de vista interesante desde Taiwan: una polémica que tiene que ver más con la ignorancia cultural que con el racismo.

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Junio 04, 2008

TAU campeón

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Campeones. Parecía imposible creerlo cuando cuatro jugadores se salieron de la carretera de madrugada cerca de Bilbao después de volver de una noche de farra. O cuando McDonald, cuyo matrimonio ya había dado mucho de qué hablar, empezó a largar contra el entrenador. O cuando Jasaitis, un internacional lituano de calidad contrastada, jugaba como un junior acomplejado. O cuando varios equipos de la mitad baja de la tabla habían ganado en Vitoria, una cancha en la que sólo el CSKA había conseguido la victoria en los últimos dos años.

Pero en los play off han sido los mejores. Es cierto que el Unicaja hizo gran parte del trabajo sucio eliminando al Real Madrid en dos partidos memorables. A la hora de la verdad, los dos mejores equipos de la temporada regular perdieron la intensidad, o las fuerzas, en el momento justo.

Ver jugar al Joventut ha sido una gozada este año y eso es lo único injusto del desenlace de la Liga. Pero en baloncesto las ligas se ganan en el play off, no en el resumen de las mejores jugadas de la semana.

Un detalle que demuestra lo importante que es contar con jugadores con personalidad y con autoridad. Al poco de que el público pitara con fuerza a los jugadores tras una derrota algo sonrojante en casa, Prigioni salió unos días después a decir en los periódicos que la gente se había equivocado. Y con razón. No pasó nada porque, supongo, los aficionados se dieron cuenta pasado el cabreo que el base tenía razón. Este, como otros, es un deporte. El hincha no puede pretender que le garanticen la victoria sólo porque ha pagado una entrada. En estas cosas hay que tomar ejemplo de los aficionados del fútbol inglés.

Dos bases de inmensa calidad, un pivot (Teletovic) que lanza de tres como un alero, uno de los tres mejores pivots que juegan en Europa (Splitter) y que podría ser titular si quisiera con los Spurs, un alero (Rakocevic) para anotar como un reloj, un tres perfecto (Mickael) porque juega mejor dentro de la zona que fuera. No son malas armas.

En total, diez jugadores de primer nivel. Con eso se gana una Liga.

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Junio 03, 2008

Un golpe bajo al baloncesto

La estupidez se ha consumado. El presidente de la Federación de Baloncesto ha destituido al seleccionador, Pepu Hernández. Uno de esos imbéciles trajeados que se arman de codos cuando toca aparecer en la foto del deportista vencedor se cree más importante que los que de verdad (jugadores y entrenadores) consiguen las victorias.

El imbécil habla de "incumplimiento de contrato". Se da como ejemplos un libro y una conferencia que Pepu dio contratado por una caja de ahorros. Como la selección está patrocinada por Cajamadrid, se supone que eso es como pasarse al enemigo, una traición.

El presidente acusó a Pepu Hernández de acudir a "actos para el baloncesto y eran para beneficio suyo" y llegó a mostrar un libro sobre el técnico que contaba con una dedicatoria a los clientes de una entidad bancaria que compite con otra empresa del ramo patrocinadora de la FEB.

Inmensa estupidez o quizá sólo una excusa reciente para camuflar el ego maltratado de algún obeso que dice que lo ha dado todo por el deporte. ¿Todo? Vuelven los tiempos de los estómagos agradecidos y abrazafarolas.

Aún dice el presidente (su nombre conocido por todos y apreciado por cualquier seguidor del baloncesto es José Luis Sáez) que la Federación es como una familia. Sí, como la familia Manson.

La crisis comenzó cuando Pepu anunció que no seguiría como seleccionador después de los Juegos. Que se sepa no había firmado un contrato vitalicio que le obligara a permanecer atado al banquillo con una gruesa cadena. Lo anunció con la antelación exigida por el contrato. No le convenía que se supiera, así que supongo que la noticia partió de una filtración de la Federación.

Algunos periodistas intoxicados lanzan rumores sin confirmar sobre el acuerdo al que habría llegado Hernández con el Barcelona. ¿Y si fuera así? Por las fechas en que se encuentra, si dejaba la selección ¿estaba obligado a esperar hasta entonces y por tanto quedarse sin equipo? Algunos dirán que sí, pero ¿lo harían ellos en su trabajo?

España no habría sido campeona del mundo sin Gasol, su mejor jugador de todos los tiempos. El hecho de que Pau no pudiera jugar la final por lesión y aun así se ganara demuestra que las virtudes de la selección como equipo eran mayores que la suma de la calidad de sus jugadores.

Y es por eso que estamos en deuda con Pepu Hernández.

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Febrero 22, 2007

Gasol se queda en Memphis

Muchos aficionados al baloncesto en España van a recibir una mala noticia hoy (en el reducido espacio que dejan en su mente a todas las noticias que no vienen de Oriente Medio, evidentemente). Esta noche se cumple el plazo para el fin de los traspasos en la NBA durante esta temporada. Todo parece indicar que Pau Gasol tendrá que permanecer en Memphis, en el segundo peor equipo de la liga con 14 victorias y 42 derrotas.

Aún hay algunos, como Sam Smith, columnista de baloncesto en el Chicago Tribune, que aún creen que los Bulls harán una última oferta por Gasol, una que incluirá a uno de sus mejores anotadores, Luol Deng, junto a dos jugadores de menor nivel más una primera ronda del draft (el sorteo para elegir a los mejores nombres de la liga universitaria). Es el mismo tipo de oferta que hasta ahora Memphis ha rechazado.

Uno de los principales obstáculos es el gran sueldo de Gasol. Es el único inconveniente de cobrar una millonada en la NBA. Con vistas a un intercambio de jugadores, el valor económico de los contratos tiene que ser parejo. Y el jugador catalán se embolsará 12,3 millones de dólares esta temporada, hasta llegar a los 17,8 en la 2010-2011. Eso pesa mucho en cualquier balanza.

Los Bulls saben, y lo reconocen públicamente, que con su plantilla actual tienen pocas posibilidades de ganar la Conferencia Este y llegar a la gran final. Su perímetro es de calidad, pero necesitan más poder anotador en la zona. Gasol es lo que allí llaman un 'siete pies' (por su altura, alguien que mide al menos 2,13) y jugadores con esas condiciones capaces de anotar unos 20 puntos o más y de coger cerca de 10 rebotes son una mercancía tan escasa como codiciada.

Para Gasol, sería una bendición jugar en Chicago. En lo deportivo, por ser la Conferencia Este, con menos competencia para los jugadores altos. Por ejemplo, a su actual nivel casi tendría garantizado jugar en el All Star Game. En lo económico, Chicago es una de las grandes ciudades de EEUU, y en la misma medida uno de los mayores mercados publicitarios del país.

El sueño del traspaso se aleja, porque Memphis no venderá barato a Pau. Quiere mucho más de lo que pueden poner los Bulls sobre la mesa. Tanto es así que es muy posible que Chicago esté pensando en una alternativa más barata, como Abdur-Rahim, de los Kings.

Quizá tras el final de temporada Gasol tenga otras opciones de cambiar de equipo. Hasta entonces, sólo podrá aspirar a mantener sus excelentes estadísticas individuales (20,1 puntos y 9,3 rebotes) y a seguir perdiendo partidos.
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23.00
Confirmado. Gasol se queda sin traspaso.

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Septiembre 03, 2006

El baloncesto puede ser maravilloso

Campeones

Más de veinte años esperando este momento. Esa canasta de Epi en el Europeo de Nantes del 1983 que sirvió para ganar las semifinales a la Unión Soviética. A la Unión Soviética. Esos madrugones para ver a España llegar a la final de los Juegos de Los Angeles un año después ganando a Yugoslavia en las semifinales. A Yugoslavia. Epi, Corbalán, Sibilio, Fernando Martín, Itu haciendo de palomero, claro.

Los bajones. Ese Europeo, poco después, en el que perdemos ante Checoslovaquia. Entre los checos, con una selección que parece sacada de un geriátrico, hay un pivot (¿Scala?, ¿Skala?) que tiene hasta barriguita. Fallamos en todo y yo fallo cuando quiero dar un golpe a una silla y por poco me dejo la muñeca en el intento. Los futboleros te miran como si tu cabeza fuera a hacer un giro de 360 grados. Estos tipos están poseídos.

El Mundial de España de 1986 se 'futboliza' y comienzan las expectivas exageradas, las victorias aseguradas antes de empezar a jugar, el triunfalismo idiota que menosprecia a los adversarios. Un quinto puesto que no está nada mal, pero que sabe a poco.

Se cae el muro de Berlín y la noticia trae maravillosos efectos colaterales. La selección soviética entra en el basurero de la historia, aunque con la cabeza muy alta. Qué victoria ante EEUU en Seúl con Sabonis hundiendo a la Armada imperial encabezada por el teniente de navío David Robinson. Sabonis se molesta cuando le dicen que es ruso, y todos sonreímos y nos hacemos lituanos porque viven el baloncesto como latinos.

Los noventa, una década (casi) para olvidar, iniciada poco antes con el octavo puesto de los Juegos de Seúl. Al menos, los Juegos de 1992 me pillan viviendo en el extranjero y no puedo ver ningún partido de la selección. El angolazo se lo comen otros.

Y llega la generación de oro. Se acaba la caspa, la cacareada falta de competitividad en los minutos finales, el juego de equipo como plan B ya que los jugadores de los 90 son muy buenos pero no llegan a la categoría de estrellas. Garbajosa se va a Italia y vuelve mejor de lo que era. Navarro y Calderón juegan con el descaro y la velocidad de los playground neoyorquinos, el baloncesto callejero imposible de arraigar en un país de futboleros. Sergio y Rudy les siguen la pista de cerca.

Y Gasol, el mejor jugador español de todos los tiempos (en un deporte de equipo). Sólo eso, Gasol. Un atisbo de grandeza en los Juegos de Atenas. El sueño se rompe porque EEUU hace el mejor partido de su torneo. Los compañeros de Gasol parecen dejar demasiada responsabilidad en sus manos cuando juegan en ataque. Se quedan maravillados al verle en la cancha, y sólo con Gasol no pueden ganar.

Hasta que el equipo está ya hecho, gracias a la intervención de Pepu Hernández. Ya no hay un solo jugador que pueda ganar solo el partido. Son tan buenos que pueden vencer un encuentro tanto si son ellos los que marcan las reglas del combate desde el primer minuto (la final) como cuando se ven obligados a jugar con las reglas del contrario (la semifinal).

Adiós al derrotismo, tan habitual por aquí cuando nos encontramos con un obstáculo. Adiós al victimismo de las excusas, a echarle la culpa de todo a los árbitros, a los contrincantes o a la mala suerte. Un gran castigo para los que juegan a no perder. Si tienes un gran equipo, puedes ganar incluso si no tienes a tu mejor jugador en pista. Sólo tienes que creer en ello.

Pues sí, Montes, es verdad. La vida puede ser maravillosa.

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Selección española de baloncesto. Wikipedia.

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Mayo 07, 2005

El TAU no conoce el miedo

El Ejército Rojo del baloncesto, aniquilado por el TAU. Y el domingo vamos a cortar la mano de Elías.

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